La vacuna del Instituto de Biotecnología de China y Cansino Biologics es segura y genera anticuerpos
Los resultados preeliminares de una vacuna que está desarrollando un equipo del Instituto de Biotecnología de Pekín (China) y la compañía Cansino Biologics, han puesto de manifiesto que es segura y logra generar anticuerpos contra el nuevo coronavirus.
Según los datos del estudio en fase 1, publicados en The Lancet y recogidos por la plataforma Sinc, la nueva vacuna es segura, bien tolerada y capaz de generar una respuesta inmunitaria contra el nuevo coronavirus en humanos. Los resultados finales serán evaluados en seis meses.
El anuncio de los investigadores chinos se suma a los realizados la semana pasada por la firma biotecnológica estadounidense Moderna que dijo haber obtenido datos provisionales positivos en la fase 1 de su vacuna contra el coronavirus. Por su parte, la Universidad de Oxford informó de que su vacuna avanzaba hacia las fases 2 y 3 y que la iba a probar en más de 10.000 personas incluyendo niños y mayores de 70 años.
«Estos resultados representan un hito importante. El ensayo demuestra que una sola dosis de la nueva vacuna COVID-19 vectorizada por adenovirus tipo 5 [Ad5-nCoV] produce anticuerpos específicos contra el virus y células T en 14 días, lo que la convierte en una posible candidata para ulteriores investigaciones», ha dicho la primera autora y líder del estudio, Wei Chen.
Sin embargo, la epidemióloga ha avisado de que estos resultados deben interpretarse con «cautela», ya que los desafíos en el desarrollo de una vacuna Covid-19 no tienen precedentes, y la capacidad de desencadenar estas respuesta inmunitaria no indica necesariamente que vaya a proteger frente al coronavirus. «Todavía estamos muy lejos de que esta vacuna esté disponible para todos», ha aseverado.
La nueva vacuna contra la Covid-19 vectorizada por Ad5 evaluada en este ensayo utiliza un virus del resfriado común debilitado -adenovirus, que infecta fácilmente las células humanas pero es incapaz de causar enfermedades- para introducir en las células el material genético que codifica las proteínas en forma de espícula con las que el SARS-CoV-2 entra en las células.
Estas células producen después la proteína de espícula y viajan a los ganglios linfáticos, donde el sistema inmunintario crea anticuerpos que reconocen esa proteína y combaten el coronavirus. En el ensayo se evaluó la seguridad y la capacidad de generar una respuesta inmunitaria de diferentes dosis de la nueva vacuna Ad5-nCoV en 108 adultos sanos de entre 18 y 60 años de edad que no estaban infectados por el coronavirus.