La Unión Europea no financiará el tren Santander-Bilbao
La Unión Europea (UE) no financiará el tren Santander-Bilbao al no incluirlo en la Red Básica Ampliada de la Red Transeuropea de Transportes, lo que hubiera supuesto adelantar su plazo de ejecución a 2040 en lugar de mantenerlo en el horizonte de 2050.
Así se deriva del acuerdo provisional alcanzado el pasado lunes por la Presidencia Española del Consejo de la Unión Europea con el Parlamento Europeo para dar luz verde a la revisión del Reglamento de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T), que cuenta con el respaldo de la Comisión Europea.
Pese a esta decisión sobre el tren Santander-Bilbao, que está en fase de redacción de estudio informativo, este acuerdo en Bruselas sí trae algunos cambios para Cantabria. Uno de ellos, es que se incorpora al Corredor Atlántico y ve promocionar a la red básica ampliada el tramo ferroviario de mercancías Santander-Palencia.
También pasa a la red básica el Puerto de Santander y la capital cántabra entra a formar parte de los nodos urbanos de la red transeuropea.
Así se recoge en un informe de la Secretaría de Estado de Transportes y Movilidad Sostenible, al que ha tenido acceso Europa Press, en el que se indica que «la promoción de dichos elementos a la red básica y red básica ampliada supone la necesidad de acomodar las infraestructuras a requisitos adicionales que suponen un cambio respecto a la situación actual».
De esta manera, respecto al Puerto de Santander, se señala «la necesidad de conectarlo con la red ferroviaria y viaria y la disposición de una terminal multimodal abierta a todos los operadores sin discriminación para el año 2030».
Por otra parte, la promoción a red básica ampliada de la conexión Santander-Palencia, «supondrá la electrificación de las líneas, las actuaciones tendentes a permitir la circulación de trenes de 740 m (en curso) con una carga por eje de 22.5 toneladas, alcanzar velocidades de al menos 100 km/h en el 75% del trazado y la habilitación de gálibos con configuración P400 y la implantación de ERTMS para el año 2040».
En este informe se indica también que la incorporación de la región al Corredor Atlántico «supondrá su inserción en las estructuras de gobernanza del corredor mejorando su coordinación con el resto de entidades publicas y privadas participantes».
Por otra parte, que Santander pase a ser nodo urbano de la RTE-T, implicará la «adopción y el seguimiento de un plan de movilidad urbana sostenible según las especificaciones del reglamento que implicará entre otras cosas, medidas para integrar los diferentes nodos de transporte y avanzar hacia la movilidad sostenible y el seguimiento de indicadores de movilidad segura, sostenible y conectada».
Para la ciudad de Santander que pasa a ser nodo urbano de la RTE-T, la adopción y el seguimiento de un plan de movilidad urbana sostenible según las especificaciones del reglamento que implicará entre otras cosas, medidas para integrar los diferentes modos de transporte y avanzar hacia la movilidad sostenible y el seguimiento de indicadores de movilidad segura sostenible y conectada.
Es también reseñable la inclusión de una nueva línea ferroviaria de altas prestaciones entre Bilbao y Santander que conecte ambas localidades y amplíe las posibilidades de comunicación transcantábricas de la Y vasca, dentro del marco del desarrollo de la Red Global. Esta incorporación está soportada por la redacción del Estudio Informativo entre ambas localidades actualmente en redacción.