La UEMOA levanta la suspensión de Malí de sus instituciones
La Unión Económica y Monetaria de África Occidental (UEMOA) –órgano dependiente de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO)– ha anunciado este domingo que levanta la suspensión de Malí de sus instituciones.
«En cuanto a Malí, la conferencia ha decidido levantar su suspensión de órganos e instituciones de la UEMOA adoptada el 9 de enero de 2022», reza un comunicado del organismo, cuyos líderes se han reunido este fin de semana en Guinea-Bissau para examinar la evolución política de Malí, Burkina Faso y Guinea (Conacry), tres estados cuyos líderes militares han prometido cumplir una hoja de ruta democrática.
Los jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros del organismo, que no han dado más detalles sobre la decisión en cuanto a Bamako, han celebrado la «resiliencia de las economías de la zona», a pesar «de los choques registrados a nivel internacional y dentro del espacio comunitario».
Así, según recoge la misiva, la cumbre ha celebrado los «esfuerzos realizados por los Estados miembros para preservar el poder adquisitivo de las poblaciones», así como las «acciones apropiadas emprendidas por las Instituciones Especializadas con miras a asegurar una financiación satisfactoria de las economías de la UEAMOA».
Los líderes de la CEDEAO respaldaron en enero de 2022 las medidas aprobadas por la UEMOA por las que se congelaban los activos de la junta militar dentro del área del Banco Central de los Estados del África Occidental (BCEAO) por la falta de avances en la transición de cara a la celebración de elecciones para devolver el poder a las autoridades civiles.
El organismo también decretó el cierre de las fronteras entre Malí y los estados miembro de la organización e impuso un embargo de mercancías, que no afectaba a suministros médicos y productos esenciales. Asimismo, acordó retirar a los embajadores en Malí de sus países miembro e impuso otras sanciones relacionadas con la ayuda financiera.
En julio de 2022, la CEDEAO levantó este tipo de sanciones –fronteras, congelación de activos y embajadores retirados–, pero mantuvo las sanciones financieras y Malí continuó suspendido de las autoridades de la CEDEAO, al entender que estas medidas tienen como objetivo a los líderes de la junta.
Assimi Goita encabezó en agosto de 2020 un golpe de Estado que derrocó al entonces presidente, Ibrahim Boubacar Keita. La junta militar designó a un presidente y a un primer ministro de transición, si bien ambos fueron derribados en una segunda asonada en mayo de 2021 que elevó finalmente al líder golpista al cargo de presidente de transición.