La UE aboga por la celebración de una segunda vuelta en las presidenciales en Bolivia
La Unión Europea (UE) ha abogado este jueves por la celebración de una segunda vuelta en las presidenciales en Bolivia, horas después de que el mandatario del país, Evo Morales, se haya declarado vencedor en los comicios.
«La UE comparte totalmente la valoración de la Organización de los Estados Americanos (OEA) de que las autoridades bolivianas deberían finalizar el recuento y de que la mejor opción sería celebrar una segunda vuelta para restaurar la confianza y garantizar el respeto total a la elección democrática del pueblo boliviano», ha dicho el bloque en un comunicado.
Así, ha recordado que la misión de observación de la OEA indicó en su informe preliminar que había detectado «defectos sustanciales en el proceso electoral, principalmente la inesperada interrupción de la publicación de los resultados de la votación, lo que socava la necesaria credibilidad y la transparencia (del proceso)».
«En un momento en el que los resultados de las elecciones presidenciales y legislativas y Bolivia están aún pendientes y aumenta la agitación civil en el país, la UE espera que el Gobierno y las autoridades electorales resuelvan la situación de una forma que respete la voluntad popular y la credibilidad del proceso electoral y se preserve la estabilidad social», ha manifestado.
Por ello, ha pedido a todas las partes que «eviten la violencia y declaraciones divisivas» y ha resaltado que «una postura constructiva es esencial para una reconciliación nacional pacífica».
«La UE ha sido un importante socio de Bolivia, promoviendo el desarrollo económico y social, así como fortaleciendo el Estado de Derecho. Nuestra cooperación está fundamentada en unos valores democráticos compartidos que deben ser respetados en todo momento», ha remachado.
El principal candidato opositor a la Presidencia, Carlos Mesa, ha reiterado durante la jornada su llamamiento a mantener las «movilizaciones pacíficas» hasta conseguir que Morales acceda a organizar una segunda vuelta para superar la crisis electoral.
Mesa ha contestado así a Morales, que ha proclamado su victoria cuando el recuento oficial le concedía el 46,8 por ciento de los sufragios, frente al 36,7 por ciento del líder opositor, una ventaja de tan solo una décima que, legalmente, le permite eludir la segunda vuelta porque le concede una ventaja de más de diez puntos sobre su competidor inmediato.
El último recuento, con el 99,12 de las papeletas escrutadas, reduce la ventaja de Morales. El líder indígena se queda en un 46,52, mientras que Mesa se acerca con un 36,92. Así las cosas, los votos finales serán determinantes para saber si Bolivia tendrá que celebrar su primer balotaje en 17 años.
El origen de la crisis fue la repentina suspensión de la transmisión de los resultados oficiales la misma noche electoral cuando la diferencia entre Morales y Mesa era de menos de diez puntos porcentuales. Cuando se retomó, más de 20 horas después, la tendencia se había revertido, por lo que Mesa ha denunciado que está en marcha «un fraude gigantesco» por parte del Gobierno.
Morales, por su parte, ha acusado a Mesa de capitanear un «golpe de Estado». «Somos los llamados a defender la democracia porque nosotros recuperamos la democracia», ha dicho este jueves en un mensaje en el que ha pedido a sus seguidores «no entrar a la provocación y la confrontación», culpando a quienes no lo «acepten» como presidente «de cualquier hecho lamentable» que pueda producirse.
Desde el domingo, se han sucedido numerosas protestas en Bolivia, tanto a favor como en contra del líder indígena. En algunos casos han derivado en disturbios y se han producido quemas de tribunales electorales, así como enfrentamientos directos entre simpatizantes y detractores de Morales y entre opositores y fuerzas de seguridad. Ambas partes han llamado a la movilización para defender su postura.