La Princesa de Asturias inicia en el Monasterio de los Jerónimos su visita oficial a Portugal
Rebelo de Sousa se desplaza personalmente al aeropuerto a recibirla
LISBOA, 12 (De la enviada especial de EUROPA PRESS, Leyre Guijo)
La Princesa de Asturias ha iniciado en el Monasterio de los Jerónimos de Lisboa su visita oficial a Portugal, la primera que hace al extranjero en solitario, a invitación del presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, que se ha desplazado personalmente al aeropuerto para recibirla.
Aquí, la Princesa Leonor ha realizado una ofrenda floral ante la tumba de Luis Camoes, donde acompañada por música ha tenido un momento de recogimiento.
Tras ello, ha realizado una pequeña visita a la basílica y el claustro acompañada por la directora del mismo, Margarida Donas, y por el prior de Santa María de Belén, José Manuel Dos Santos.
La heredera del trono, que ha viajado acompañada por el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, además del jefe de la Casa del Rey, Camilo Villarino, ha aterrizado en el aeropuerto militar Figo Maduro tras haber sido despedida con honores en el aeropuerto de Barajas, como ocurre siempre que los Reyes realizan un viaje oficial.
Antes de entrar, la Princesa ha saludado desde la distancia con la mano a algunas personas congregadas que estaban esperando para ver su llegada frente a este monumento Patrimonio de la Humanidad.
Desde el Monasterio, la Princesa de Asturias se trasladará ahora al Palacio de Belén, residencia del presidente de la República, Marcelo Rebelo de Sousa, quien la recibirá con honores.
Será aquí donde tenga lugar el encuentro formal y donde la hija mayor de Felipe VI pronuncie unas breves palabras en el brindis durante el almuerzo en su honor ofrecido por el jefe de Estado luso, quien mantiene una muy estrecha relación con Felipe VI.
Además, prueba de la importancia que da Portugal a la visita es el hecho de que la hija mayor del Rey recibirá la Gran Cruz de la Orden Militar de Cristo de manos del presidente portugués, que fue precisamente quien le extendió la invitación para la visita.
Esta distinción se reserva para reconocer los servicios prestados al país por altos cargos y funcionarios, si bien se concede frecuentemente a los cónjuges de jefes de Estado extranjeros en visita oficial y solo de forma excepcional a algunos de estos últimos.
Don Felipe, entonces aún Príncipe de Asturias, también recibió la Gran Cruz de la Orden de Cristo en su primera visita a Portugal en octubre de 1988, mientras que Juan Carlos I fue condecorado en 1996 y Doña Sofía la recibió en 1978. Asimismo, goza de esta distinción el expresidente Felipe González, quien fue distinguido en 1984.
Para completar su visita, la Princesa Leonor se trasladará al Oceanário de Lisboa. Tal y como se adelantó cuando se dio a conocer la fecha del viaje, este «tendrá un enfoque particular en la protección del medio ambiente y la conservación de los océanos, temas prioritarios para Portugal y España».