Industria abre la puerta a nuevas formas de financiación en seguridad y defensa y a la colaboración privada
El secretario general de Industria y Pyme considera que no hay soberanía nacional sin una industria propia y avanzada en defensa
El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, en el marco del Fondo Europeo de Defensa, ha dejado la puerta abierta a una nueva forma de financiación para la industria que sea capaz de responder a la «complejidad» de los nuevos programas de defensa, como el uso compartido de capacidades entre varios países europeos.
En un artículo del nuevo número de la revista del Ministerio Economía Industrial , el secretario general de Industria y Pyme, Raül Blanco, ha señalado que los desafíos que presentan las nuevas formas de seguridad y defensa para los países hacen necesario explorar nuevas formas de financiación.
Así, dentro de las discusiones para la definición del Fondo Europeo de Defensa, uno de los aspectos más relevantes ha sido el análisis instrumentos financieros que permitan a los estados miembros abordar estos programas «de una forma sostenible y sin impacto en déficit».
Entre las nuevas posibilidades puestas sobre la mesa, destacan el leasing de equipos, un medio habitular en el ámbito civil, o el uso conjunto de capacidades por varios países europeos.
Para Blanco, España «debe estar en el grupo promotor y líder de los grandes programas europeos», ya que considera que no hay «soberanía nacional o soberanía europea sin una industria propia y avanzada en defensa». «Solo hay dos opciones: o se apuesta por desarrollar tecnología y capacidad propia o se depende del exterior absolutamente», incide el secretario general.
DIGITALIZACIÓN E INNOVACIÓN
Entre el resto de retos a los que se enfrentará el sector con el fin de conseguir ese propósito, Blanco destaca la necesidad de digitalizar esta industria para que mantenga su competitividad, de impulsar el I+D+i, la importancia del desarrollo del capital humano con nuevos programas de formación de los trabajadores y en la adaptación de las empresas que se dedican al sector industrial de defensa –en un 83% pymes– para que puedan participar en consorcios industriales transnacionales.
Por último, Blanco también recuerda que las acciones de financiación llevadas a cabo en Europa, a través del Plan Europeo de Desarrollo de la Industria de la Defensa (EDIDP) o el Fondo Europeo de Defensa (EDF) a partir del año 2021, serán un elemento «muy importante en la financiación de la investigación y el desarrollo de capacidades», aunque hace hincapié en que «no se debe perder de vista que un objetivo prioritario es la consolidación de consorcios industriales que permitan a la industria europea abordar proyectos que de forma individual no serían asumibles por ningún país».