La ONU condena la represión «desproporcionada» de la Policía de Bahréin a una sentada pacífica en una cárcel
La oficina de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha denunciado el uso «innecesario y desproporcionado» de la Policía de Bahréin contra una protesta pacífica que denunciaba las pésimas condiciones de vida en una cárcel del país.
Según las informaciones recabadas por la ONU, las fuerzas especiales de la Policía usaron granadas aturdidoras y golpearon a los detenidos en la cabeza con palos durante la dispersión de la sentada en la presión de Jau el 17 de abril.
De acuerdo con estos documentos, las autoridades se llevaron a 33 manifestantes a otro edificio de la prisión, donde se encuentran incomunicados y sin acceso a familiares o abogados, en lo que supone una violación tanto del Derecho Internacional como de la propia legislación interna del país, ha denunciado la portavoz de la oficina, Marta Hurtado.
Los presos denunciaban desde el 5 de abril el nulo acceso a tratamiento médico después de que un preso político, Abás mal Alá, falleciera entre quejas de que ningún médico le visitó para tratarle apropiadamente.
«Instamos al Gobierno a que inicie de inmediato una investigación exhaustiva y eficaz sobre la violenta represión de la sentada en la prisión de Jau. También les instamos a que proporcionen información sobre el bienestar de los 33 presos actualmente recluidos en régimen de incomunicación y a que se aseguren de que puedan ponerse en contacto con sus abogados y familiares», pide la portavoz.
«Hacemos un llamamiento», añade, «para que las autoridades consideren la liberación de más detenidos para aliviar la congestión carcelaria y reducir el riesgo de que la COVID-19 se propague entre la población carcelaria».