La MINUSCA acusa a los rebeldes de «intentar asfixiar» Bangui mediante ataques y cortes de carreteras
La OCHA expresa su preocupación y tilda los ataques de «inaceptables»
La Misión Unidimensional Integrada de Naciones Unidas para la Estabilización en República Centroafricana (MINUSCA) ha acusado este jueves a la coalición de grupos rebeldes y sus «aliados políticos», que cuentan con el apoyo del expresidente François Bozizé, de «intentar asfixiar» Bangui, la capital del país, mediante ataques y bloqueos de carreteras.
En un comunicado, la misión de la ONU ha señalado que dichos rebeldes son los «responsables del drama social y humanitario que vive la población centroafricana» y ha matizado que los ataques contra los convoyes por parte de los rebeldes «hacen imposible el acceso a alimentos, medicamentos y otros productos esenciales».
«Estos grupos armados y sus aliados políticos son responsables de violaciones graves del Derecho Internacional», ha recalcado la MINUSCA, que señala que se ha vulnerado no solo la Constitución de República Centroafricana sino los Convenios de Ginebra de 1949.
El portavoz de la MINUSCA, Vladimir Monteiro, ha condenado, además, el ataque perpetrado el lunes contra un convoy en Zoukombo, en el oeste del país, que dejó tres heridos que están siendo ahora tratados en un hospital de la misión de la ONU en Bouar. Así, ha asegurado que todos los responsables de ataques dirigidos a bloquear la importación de suministros «tendrán que responder por sus actos».
Por otra parte, las fuerzas pacificadoras de la ONU han señalado que han dado prioridad a la reapertura de la ruta Béloko-Bangui para «permitir la reanudación de los movimientos logísticos». Sin embargo, ha alertado de que el peligro que suponen los grupos armados está «latente».
LA OCHA EXPRESA SU PREOCUPACIÓN
La Oficina de Coordinación para Asuntos Humanitarios (OCHA) de Naciones Unidas ha trasladado este mismo jueves su preocupación por la situación en el país, donde se han provocado cortes de las principales carreteras que conectan Bangui con el resto del país y su puerto más cercano, que se encuentra en Camerún, como resultado de la creciente violencia.
«Los bloqueos frente a una situación alimentaria ya de por sí frágil han incrementado el precio de los productos básicos», ha alertado la coordinadora de asuntos humanitarios para el país, Denise Brown.
El ataque del lunes contra un convoy en el que había cinco camiones con productos humanitarios de «vital importancia» es «totalmente inaceptable», ha aseverado antes de explicar que esto se ha traducido en un aumento de los precios de la carne, el pescado y las cebollas, entre otros productos, que han registrado un incremento del 50 por ciento.
En este sentido, ha aseverado que el transporte de productos se ha visto obstaculizado desde mediados de 2020 y ha afirmado que el «impacto sobre la protección y el bienestar de los civiles inocentes es devastador». «La población afectada necesita nuestra ayuda más que nunca y no pueden esperar más», ha dicho.
Asimismo, ha llamado a todos los implicados a seguir trabajando para «alcanzar una solución en beneficio de aquellos que sufren en mayor medida». Actualmente unas 2,8 millones de personas, más de la mitad de la población del país, necesitan ayuda humanitaria, según datos de la OCHA.
Desde que se ha producido un aumento de la violencia en relación con las elecciones generales de diciembre, unas 200.000 personas han tenido que desplazarse dentro del país; solo la mitad de ellos ha regresado a sus hogares.