La Ley de Amnistía se tramitará en la Comisión de Justicia del Congreso y no irá a la Constitucional
La proposición de Ley Orgánica de Amnistía que el PSOE pactó con los independentistas de ERC y Junts se tramitará finalmente en la Comisión de Justicia del Congreso y no pasará por la Constitucional, según han confirmado fuentes socialistas, con lo que se confirma también que se ha desechado la opción de forzar un debate exprés en lectura única en sesión plenaria.
La ley superó su primer examen parlamentario la pasada semana al ser tomada en consideración por el Pleno del Congreso con el apoyo de PSOE, Sumar y sus aliados nacionalistas e independentistas, y el voto en contra de PP, Vox, CC y UPN.
El siguiente paso es abrir un plazo de enmiendas y enviar la ley a una de las comisiones legislativas del Congreso para su tramitación, una decisión que la Mesa del Congreso adoptará este martes en favor de la Comisión de Justicia que preside el socialista murciano Francisco Lucas Ayala, y no en la de Constitucional, que es la otra a la que podría haber ido.
En todo caso, en una y otra comisión los votos son los mismos (37 diputados en total) y la distribución de los grupos es exactamente igual, ya que se hace en proporción al mapa del hemiciclo, y además en ambas el PSOE y Sumar cuentan con mayoría en la mesa con tres votos frente a dos del PP.
CAYETANA, ERREJÓN Y RUFIÁN SE QUEDAN SIN LA LEY
Lo que sí será diferente son los portavoces que participarán en la tramitación, aunque en todo caso los grupos siempre pueden hacer cambios. En la Comisión Constitucional, que preside José Zaragoza, del PSC, figuran como portavoces destacadas figuras de la Cámara como Cayetana Alvarez de Toledo (PP), Carlos Flores (Vox), Íñigo Errejón (Sumar), Gabriel Rufián (ERC) o Mertxe Aizpurua (Bildu), y a priori ya no estarán en la tramitación de la ley.
En su lugar, los portavoces de la Comisión de Justicia serán Francisco Aranda (PSC-PSOE), María Jesús Moro (PP), Javier Ortega Smith (Vox), Enrique Santiago (Sumar), Pilar Vallugera (ERC) y Jon Iñarritu (Bildu), entre otros.
Eso sí, la decisión de asignar ya la ley a una comisión supone descartar definitivamente la opción de haber forzado el trámite de lectura única en el que todos debates se produjeran en el Pleno de la Cámara sin pasar por ponencia ni comisión, como sí se hizo hace un año con la supresión del delito de sedición.
SE ABREN PLAZOS DE ENMIENDAS
La Mesa abrirá este martes plazo de presentación de enmiendas, que podrán ser de totalidad si incluyen un texto alternativo, lo que obligaría a un nuevo debate en el Pleno de la Cámara, o ya parciales para introducir cambios en el articulado.
Esas enmiendas se discutirán en enero, ya que la idea de los proponentes es habilitar a la Comisión de Justicia para ir avanzando ese mes, pese a que la Constitución lo excluye de los periodos ordinarios de sesiones. Todo con el objetivo de que el Senado reciba la ley en febrero y, como el PP piensa dilatar los plazos en la Cámara Alta hasta el máximo de dos meses que permite la Carta Magna, no se prevé que esté en vigor antes de mayo.