La Justicia turca condena a cadena perpetua a 121 personas por la intentona golpista de 2016
Un tribunal de Ankara ha condenado a cadena perpetua a 121 personas por su presunta implicación en el fallido golpe de Estado de 2016, del que las autoridades turcas han culpado a una red liderada por el clérigo Fethulá Gulen, exiliado en Estados Unidos.
A todos los condenados se les acusaba de intentar subvertir el orden constitucional de Turquía, aunque en el caso de 86 de ellos se les han incluido agravantes –implica condiciones más duras de reclusión–. Estarían implicados en acciones ilegales en la comandancia de la Gendarmería, según la agencia de noticias Anatolia.
Un antiguo coronel, Erkan Oktem, ha recibido nueve condenas a muerte con agravantes y a otros 20 años de cárcel por asesinato, en concreto por ordenar la ejecución de un mando de la Policía antiterrorista y de su guardaespaldas horas antes de la asonada. El jefe policial sobrevivió a las heridas; no así el guardaespaldas.
Más de 1.900 personas han sido condenadas a cadena perpetua desde que comenzaron los procesos judiciales por la intentona golpista, que se saldó con el arresto o el cese de decenas de miles de funcionarios. Unas 250 personas perdieron la vida y más de 2.000 resultaron heridas por la movilización militar.