La junta militar de Níger ordena el cierre de la Cruz Roja y su salida inmediata del país
La junta militar de Níger ha ordenado el cierre del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y su salida inmediata del país africano, sin dar detalles sobre las razones detrás de esta decisión, si bien a finales de 2024 Niamey expresó su preocupación por la gestión de la ayuda humanitaria asignada por la Unión Europea a las ONG, incluido el CICR.
El Ministerio de Exteriores nigerino entregó a finales de enero una nota verbal a la organización. Fuentes consultadas por el portal de noticias nigerino Air Info han indicado que la nota llegó este martes al CICR, que todavía no se ha pronunciado públicamente al respecto, aunque ese mismo día publicó su último informe sobre los resultados de su acción durante el primer semestre de 2024.
El CICR, presente en Níger desde 1990 con oficinas en Diffa, Taillaberi y Tahoua, intensificó sus actividades en 2007 durante el levantamiento armado de los grupos separatistas tuareg. Según indica en su página web, el año pasado entregó ayuda sanitaria a más de 120.000 víctimas del conflicto armado.
En noviembre, la junta militar liderada por Abdourahamane Tchiani retiró las licencias para operar a la ONG francesa Agencia de Ayuda para la Cooperación Técnica y el Desarrollo (Acted), de carácter humanitario, y a la nigerina Acción por el Bienestar (APBE).
El golpe de Estado de julio de 2023, que supuso el derrocamiento del presidente electo, Mohamed Bazoum, y el ascenso al poder a una junta militar encabezada por Abdourahamane Tchiani, incluyó a Níger dentro de un grupo cada vez más numeroso de regímenes africanos críticos con la presencia occidental y proclives, en cambio, a acercamientos a Rusia.