La Generalitat prevé una ocupación elevada en Cataluña, sin afectación por las manifestaciones
El director general de Turismo constata la recuperación y critica las previsiones de caídas «poco rigurosas»
BARCELONA, 29
El director general de Turismo de la Generalitat, Octavi Bono, prevé una buena Semana Santa para el sector turístico de Cataluña, especialmente en destinos de montaña y también en Barcelona, y asegura que no se esperan variaciones debido a las manifestaciones e incidentes de los últimos días en protesta por la detención de Carles Puigdemont y el encarcelamiento de políticos catalanes.
«No detectamos que puedan haber cambios en el corto plazo, y las expectativas para los próximos días de vacaciones son elevadas, sin que haya habido corrección de estos valores», ha afirmado en una entrevista de Europa Press.
Bono ha argumentado que la mayoría de las manifestaciones han sido pacíficas, y que desde el exterior se ha visto así. «A mí me parece que el grueso de la expresión de las manifestaciones que se hacen en la ciudad en un sentido u otro se ha venido haciendo siempre con la normalidad y el civismo predominante desde hace mucho tiempo», declaró.
«Cuento que la gente ya sabe interpretar de qué forma se está canalizando toda esta situación y este proceso en Catalunya. Hace mucho tiempo que hablamos, que nos mostramos al mundo de una determinada manera, y creo que también forma parte de la imagen y la percepción que se puede tener en el exterior», ha añadido.
Tampoco prevé que esta situación pueda tener una afectación negativa a la llegada de turistas de cara a verano, y ha resaltado que las reservas de vuelos en el Aeropuerto de Barcelona han aumentado un 5% respecto a la temporada pasada, a la vez que aerolíneas con base en Barcelona como Vueling y Norwegian han aumentado sus plazas en un 12% y un 77%, respectivamente, lo que ha considerado un «factor tranquilizador».
RECUPERACIÓN DE LA ACTIVIDAD.
Bono ha constatado que en los dos primeros meses de 2018, los datos muestran que la actividad turística en Cataluña ha empezado a recuperarse «después de la inflexión del último trimestre del año pasado».
Ha indicado que en octubre bajó en un 4% el número de visitantes internacionales pero aumentaron los ingresos; en noviembre se registraron descensos del 2% y el 4%, respectivamente, y en diciembre, del 12% y el 6%, aunque se acabó cerrando el año con un crecimiento global del 5% en número de turistas y de más de un 9% en ingresos.
En cuanto a los dos primeros meses de 2018, ha señalado que se empieza a ver «una corrección al alza», ya que en enero se registró un crecimiento del 2% en visitantes y más del 11% en ingresos respecto al mismo mes de 2017, y en febrero –con datos aún parciales–, las pernoctaciones hoteleras crecieron un 0,4% y la actividad en los aeropuertos catalanes, un 6,5%.
Ha manifestado que no se puede asegurar que la caída se deba solo al proceso independentista, ya que en la segunda mitad del año sucedieron otros acontecimientos importantes como los atentados, las huelgas en el Aeropuerto, y el hecho de que en Barcelona «se puede haber percibido una mirada poco amable del fenómeno turístico», lo que demuestra la capacidad competitiva de Cataluña como destino turístico, ya que ha acabado con un crecimiento en el conjunto del año.
PREVISIONES POCO RIGUROSAS.
Bono ha criticado que hubo «unas cuantas voces», entre las que ha destacado Fomento del Trabajo, que lanzaron previsiones poco rigurosas sobre la caída de la actividad turística, lo que ha subrayado que los datos han demostrado que no eran ajustadas.
«Hubo unas cuantas voces, y yo pongo el foco en las que tuvimos en el propio país. Fomento del Trabajo lanzó datos muy dramáticos y sin hacer una aproximación rigurosa al cálculo y a su definición», ha reprochado.
«Fomento habló de una caída del 40% y Exceltur del 30%, y al final hemos visto que las caídas se han movido entre el 4% y el 6% en ingresos y entre el 2% y el 12% en visitantes, muy alejadas de la realidad», ha sostenido.
«No se le hacía ningún favor al sector turístico cuando se hablaba de caídas del 40%, y los que eran responsables de hacerlas debían tener una determinada intención, que puedo intuir, pero seguramente no defendían al sector», ha concluido.