La Fundación Pro CNIC y Ciencia renuevan su acuerdo para continuar trabajando con el CNIC hasta 2028
MADRID, 17
El secretario general de coordinación científica del Ministerio de Ciencia, Rafael Rodrigo, y el presidente de la Fundación Pro CNIC, Luis de Carlos, han formalizado un convenio para renovar el compromiso adquirido por las 13 empresas privadas que constituyen la organización para continuar participando en el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) hasta el año 2028.
Según palabras el director general del CNIC, Valentín Fuster, «esta innovadora fórmula de financiación público-privada va a permitir al CNIC permanecer como referente mundial en la investigación cardiovascular», además, asegura que «los beneficios se trasladan al paciente».
Esta alianza supone «la única forma de avanzar» en la lucha contra la que es «la primera causa de muerte en los países desarrollados y que pronto lo será también en las regiones más pobres», explica Fuster. Luis de Carlos, por su parte, ha mostrado especial agradecimiento a los patronos por su implicación, quienes, a finales de 2028, habrán aportado más de 90 millones de euros al proyecto.
La financiación de las empresas de la fundación contribuye a que la investigación del CNIC repercuta directamente en el cuidado y la mejora de la salud de la población general. Además, parte de sus innovaciones «se traducen en patentes que generan un retorno económico y favorecen el desarrollo del I+D+i de España», aseguran desde la entidad.
Gracias a la renovación de este convenio, la fundación seguirá identificando y formando jóvenes brillantes que muestran interés por la ciencia y por la investigación desde etapas tempranas de su educación.
Las empresas asociadas con la fundación no solo aportan fondos, sino que también colaboran en la toma de decisiones y organización del centro a través de su participación en el Patronato y la Comisión Delegada del CNIC.
En 2005, el Gobierno y un grupo empresas españolas firmaron un acuerdo para impulsar la investigación cardiovascular española que fue el origen de la Fundación Pro CNIC, entidad a través de la cual estas empresas canalizan sus aportaciones destinadas a la financiación del CNIC, y que es un ejemplo de mecenazgo científico.
En ella convergen los intereses solidarios de algunas de las empresas e instituciones más importantes en España: Acciona, Banco Santander, BBVA, Endesa, Fundación Mapfre, Fundación Mutua Madrileña, Fundación Ramón Areces, Fundación Repsol, Naturgy, Inditex, «la Caixa», Prisa y Telefónica.
TRES EJEMPLO DE COLABORACIÓN
Los tres ejemplos que mejor ilustran esta contribución son la comercialización de la polipíldora, desarrollada por el CNIC, ha generado ya royalties de más de 1,5 millones de euros, convirtiéndose en el primer fármaco aprobado en Europa para la prevención secundaria cardiovascular.
Otro ejemplo de investigación traslacional es la nueva patente en imagen cardiaca del CNIC, que ha acortado los tiempos de la resonancia magnética de 40 minutos a menos de uno. Según sus responsables, la sustancial reducción de tiempo tendrá una importante repercusión en el bienestar del paciente, en la eliminación de las listas de espera y en un diagnóstico más preciso para un mayor número de pacientes.
Por último, el biomarcador para el diagnóstico de miocarditis aguda, identificado en el CNIC, ha permitido desarrollar un biosensor capaz de distinguir entre dicha enfermedad y un infarto en solo 30 minutos con una muestra de sangre del paciente para, así, poder tratarlo adecuadamente.
