La Fiscalía panameña investiga la posible relación de una secta con una fosa común

La Fiscalía de Panamá imputará a tres personas por un presunto delito de homicidio a raíz del hallazgo el domingo de una fosa con restos de huesos que, según las autoridades, estaría relacionada con una secta desarticulada en enero en la región indígena de Ngäbe Buglé.

El Ministerio Público informó a principios de semana de este hallazgo y de las tareas de extracción de los restos, en las que participa personal del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses. Las autoridades no han determinado por ahora la cantidad de cadáveres que podría haber.

La Fiscalía panameña ha confirmado este viernes que solicitará ante un juez que se imputen cargos contra tres personas «presuntamente vinculadas con el hallazgo de restos humanos dentro una fosa clandestina».

Fuentes fiscales citadas por el diario La Prensa han sugerido que esta fosa guardaría relación con una secta que operaba en la zona de Agua de Salud, en el distrito de Ñurum, y cuyos supuestos líderes ya están detenidos. A este tipo de grupos se le atribuyen rituales de abusos e incluso sacrificios.

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