La facturación del sector de recobro creció un 7,7% en 2019 hasta 1.050 millones de euros, según DBK
El volumen de negocio de las compañías dedicadas a la recuperación de deudas alcanzó los 1.050 millones de euros en 2019, lo que implica un incremento del 7,7%, variación inferior a la registrada en 2018 (+14,7%), según el observatorio sectorial DBK de Informa.
La cartera de deuda cedida para su gestión por empresas especializadas aumentó un 6,4%, hasta los 250.000 millones de euros, habiendo alcanzado en el período 2005-2019 un aumento medio anual superior al 20%.
El estudio Empresas de Gestión de Impagados señala que la mejora de los indicadores económicos y del mercado laboral, junto con la mejor calidad de la deuda, siguieron favoreciendo la actividad de recobro. Así, el importe recuperado en 2019 ascendió a 26.000 millones de euros, elevándose el ratio de recuperación hasta el 10,4%.
El fuerte impacto de la pandemia provocará una desaceleración del ritmo de crecimiento del volumen de negocio en el sector al cierre de 2020, según el informe. Sin embargo, «éste se verá favorecido a corto plazo por el repunte de la morosidad y la externalización de la cartera de deuda por parte de las entidades financieras, si bien la mayor dificultad de recobro motivará un descenso de la tasa de recuperación por primera vez en siete años», ha asegurado DBK.
Por tanto, el estudio advierte de que el menor dinamismo de los ingresos y el deterioro del ratio de recuperación se traducirán en «una pérdida de rentabilidad por parte de las empresas».
Además, en el sector continúan produciéndose operaciones de compra e integración de empresas, que siguen haciendo aumentar el grado de concentración de la oferta. Los cinco primeros operadores reunieron en 2019 el 56,5% del mercado, participación que se aproximó al 70% al considerar a los diez primeros.