La estacionalidad hotelera, enemiga de la nueva reforma laboral, según Braintrust
La firma de consultoría y servicios profesionales, Braintrust, ha lamentado que la nueva reforma laboral no tendrá efecto en la industria turística hasta que la desestacionalización sea una realidad en España.
En concreto, la compañía ha puesto como ejemplo el año 2019, en el que se muestra la concentración del alojamiento en los meses de mayo a septiembre, frente al bajo movimiento fuera de dicho período, lo que supone «una inmensa dificultad para la sostenibilidad económica del modelo, y con ello para una empleabilidad continuada».
Galicia, Murcia, Asturias o Castilla y León se sitúan muy cerca de los niveles de viajeros prepandemian cuanto a apartamentos turísticos se refiere.
Según la consultora, los números reflejan muy bien la dependencia del turista internacional en algunas comunidades autónomas como Baleares, Canarias, Cataluña o Madrid, dependencia que, «en tiempos de crisis estrangula no sólo el modelo turístico sino también el económico en dichas regiones».
Sobre el turista nacional, Braintrust considera que es el que más equilibrio le puede dar al modelo turístico, porque diversifica sus vacaciones a lo largo de todo el año y elige destinos españoles para viajes de fin de semana o estancias cortas como los city breaks .
Según el Barómetro, este año casi un 75% de los españoles se quedará en España, incluso aunque se levanten las restricciones a nivel internacional.
Para el director de Hotelería y Ocio de Braintrust, José Ignacio Sánchez Butragueño, los datos de 2021 no son del todo representativos pero sí muestran unas tendencias direccionalmente válidas y de las que se sacan conclusiones interesantes.
«Los hoteleros no podemos quedarnos sentados, esperando que todo vuelva a ser como antes, es la hora de diversificar y adaptar la oferta de hoteles y marcas, de redefinir la propuesta de valor, y maximizar la rentabilidad», ha destacado.
El experto manifiesta que las claves son la innovación, la sostenibilidad y un enfoque de rentabilidad a través de un mayor ADR (precio medio) para que España lidere el turismo en el futuro.