La electromovilidad, una oportunidad para la descarbonización de las economías de Panamá, Uruguay y Paraguay
Las economías de Panamá, Uruguay y Paraguay tienen una oportunidad en la movilidad eléctrica para descarbonizar sus economías, debido a ser tres países con una matriz enérgética «muy limpia».
Según ha apuntado la gerente de acción climática y biodiversidad positiva del Banco de Desarrollo de América Latina (CAF), Alicia Montalvo, estos países están «preparados» para avanzar en la movilidad eléctrica, aunque también se enfrentan a «importantes barreras tecnológicas y financieras».
En el evento Movilidad eléctrica para descarbonizar el transporte en Panamá, Paraguay y Uruguay, organizado por el CAF en el marco de la COP 27, distintos responsables de medio ambiente de Paraguay, Uruguay y Panamá han coincidido en la necesidad de mayores mecanismos financieros que faciliten al usuario último «optar por un vehículo eléctrico». «Tenemos un importante reto financiero y tecnológico», ha apuntado el director de Cambio Climático del ministerio del Ambiente de Paraguay, Ulises Lovera.
En concreto, Paraguay cuenta con «la producción necesaria de energía eléctrica», pero es necesario adaptar la transmisión y la red eléctrica al consumo que puede representar la electromovilidad del futuro.
Por su parte, la directora nacional de cambio climático de Uruguay, Natalie Pareja, también ha apelado a una mayor financiación. «En Uruguay se ha avanzado mucho, pero falta mucho más, sobre todo para que el proceso sea más rápido», ha sentenciado.
Asimismo, los tres países han coincido en que otro obstáculo es el tamaño de sus economías. «Por este motivo, apostamos por aprovechar las economías de escala, y llevar a cabo proyectos regionales con territorios que compartan la misma visión», ha explicado el responsable de cambio climático del ministerio de Medio Ambiente de Panamá, Juan Lucena.
Finalmente, el moderador del evento y ejecutivo del CAF, Alejandro Miranda, ha recordado la importancia de que esta financiación no provenga únicamente del sector público, sino que el objetivo de la entidad bancaria es ampliar las líneas de crédito para el sector privado.