La Defensoría del Pueblo de Colombia emite una alerta ante la «expansión» de los grupos armados en Antioquia
La Defensoría del Pueblo de Colombia ha alertado de una «expansión» de los grupos armados en el noreste del departamento de Antioquia ante el aumento de los desplazamientos forzosos, los homicidios y amenazas contra la población local.
En un comunicado, las autoridades han indicado que esta proliferación de grupos armados se ha producido especialmente en municipios como Angostura, Campamento, San Andrés, Toledo y Yarumal.
Así, han señalado que en estas zonas habría un alto riesgo de «vulneración de los derechos fundamentales de la población civil». En dichos municipios existe una alta presencia de grupos armados como el Ejército de Liberación Nacional (ELN), las autodenominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia (Agc), también conocidas como Clan del Golfo, disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y los Pachelly, entre otros.
El interés de los grupos en la zona radica en que es un punto estratégico que conecta Medellín con la costa atlántica, permite el cultivo ilícito y tiene poca presencia institucional.
Según la Defensoría, la explotación de los recursos minerales en los cinco municipios ha permitido que los grupos armados se financien a través de la extorsión a empresas y mineros particulares.
Además, estos grupos están interesados en el negocio de la minería ilegal, pues «aparte del cobro de extorsiones a mineros legalizados, en la zona se practica la extracción ilegal de oro y otros minerales», recoge el texto.
Por otra parte, la Defensoría ha advertido de que estos grupos buscan expandirse, principalmente las Agc y las disidencias de las FARC, lo que provoca «constantes enfrentamientos tanto en las zonas rurales como en las limítrofes».