La conservera bermeana Hijos de Serrats y AZTI, premiados en los Tuna Awards
VITORIA, 11
La empresa conservera de Bermeo (Vizcaya) Hijos de Serrats y el centro tecnológico AZTI han resultado ganadores de la tercera edición de los Tuna Awards 2025, en la categoría de Economía Circular , por su proyecto conjunto Resaltun, una iniciativa orientada a maximizar la sostenibilidad en la cadena de valor del atún.
El galardón, organizado por Anfaco-Cytma en colaboración con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, reconoce acciones y desarrollos que aprovechan al máximo el modelo de negocio circular, fomentando la valorización de subproductos y su conexión con otros sectores.
Resaltun, centrado en el aprovechamiento integral del atún y la reducción del desperdicio alimentario, constituye «un ejemplo de cómo la colaboración entre empresa e investigación permite avanzar hacia procesos productivos más eficientes, sostenibles y responsables con el entorno», según ha informado el Gobierno Vasco en un comunicado.
Hijos de Serrats y AZTI son socios de Bermeo Tuna World Capital (BTWC), alianza internacional que trabaja para situar a Bermeo como referente mundial en la sostenibilidad del atún.
El Gobierno vasco ha destacado que este reconocimiento internacional pone de relieve el valor de la cooperación entre distintos eslabones de la cadena de valor del atún, que permite avanzar en la transición hacia un modelo económico más sostenible.
El Ejecutivo autonómico ha destacado que con este premio, el sector atunero vasco «remarca su posición referencial en innovación y sostenibilidad, proyectando a nivel internacional el compromiso de sus agentes con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible».
La empresa Marine Instruments, también asociada de Bermeo Tuna World Capital, ha sido galardonada en la categoría Revolución 4.0. Además, otras empresas asociadas a BTWC, como Zunibal y Bolton Food, también resultaron finalistas.
El proyecto Resaltun, basado en la tecnología de nanofiltración, revaloriza lo que antes era un residuo lo que suponía, además de costes de gestión, transporte, almacenamiento y tratamiento, con un importante impacto ambiental.
Este nuevo proceso supone una solución innovadora y medioambientalmente sostenible que permite recuperar una salmuera limpia y en condiciones de reuso. Además, posibilita la valorización del concentrado proteico obtenido para su uso como nutrición animal o para la producción de biofertilizantes.



