La consellera de Salud de Baleares: «Nadie ha presionado a este Govern y nada se ha dejado caducar»

El PSIB afirma que se ha fabricado «desde la calle Génova» una «fabulación» contra Armengol y exige aclarar el papel de Tellado

PALMA, 5

La consellera de Salud, Manuela García, ha declarado este martes en el Parlament, en relación al caso Koldo, que «nadie ha presionado a este Govern y nada se ha dejado caducar», lo que ha contrastado con la actuación del Ejecutivo Armengol porque «no reclamaron durante tres años» ya que «estaban comprando mascarillas falsas a sus amigos del Partido Socialista y del Ministerio de Fomento».

Así se ha expresado García dentro de una sesión de control al Govern en la que, a lo largo de las preguntas parlamentarias, los miembros del Ejecutivo y los diputados del PSIB se han acusado mutuamente de corrupción por la rama balear de la trama, responsabilizándose unos y otros de haber dejado el expediente «en un cajón».

Tanto García como el vicepresidente, Antoni Costa, y la consellera de Presidencia y Administraciones Públicas, Antònia Maria Estarellas, han insistido en que la reclamación a Soluciones de Gestión no ha caducado, pidiendo al PSIB que «deje esa estrategia» porque «no les está funcionando».

El PSIB se aferra a extractos literales de los autos de la Audiencia Nacional, basados en pinchazos telefónicos a los investigados.

De las conversaciones se desprende que éstos llegaron a la conclusión de que el expediente caducaría el 18 de enero si la administración no actuaba, y al acercarse la fecha dejaron de hablar del tema; de ello el auto entiende que podría «colegirse» que efectivamente habría caducado. Las conversaciones intervenidas también aluden a una resolución del IbSalut en la que se establecería un plazo de tres meses.

Sin embargo, el Govern mantiene que el expediente tiene una vida de ocho meses y que sigue plenamente vigente. «Los que quieren que caduque son ustedes, Negueruela y la trama corrupta», ha dicho Estarellas, que además ha reiterado que en cualquier caso la caducidad no condicionaría la capacidad del Ejecutivo de reclamar.

En cambio, ha apuntado, sí añade «dificultades» para reclamar el certificado del IbSalut avalando el contrato de las mascarillas a pesar de que por aquel entonces ya tenían los resultados de los análisis.

Al respecto, el Govern ha afeado al PSIB que sus gestores «ocultaran» este certificado «a la Unión Europea, a la Intervención General de la Comunidad Autónoma y a la Guardia Civil», según Antoni Costa. «Pidan responsabilidades a Armengol, a Gómez, a Fuster y Palomino», ha dicho Estarellas.

En la misma línea, la titular de Salud ha exhibido una de las mascarillas almacenadas, «una falsificación de FFP2». «A quien tendría que estar pidiendo explicaciones es a su consellera de Salud que lleva dos semanas sin abrir el pico», ha apostillado García, añadiendo que su Govern trabajará para reintegrar no 2,6 millones, sino «el 100 por cien de lo que abonaron a la trama del sr. Koldo».

Por su parte, el vicepresidente ha resaltado que se ejecutara el pago a pesar de que poco después de recibir las mascarillas el Govern «ya sospechaba» que eran «defectuosas». Para Costa, las únicas explicaciones del PSIB han sido «hipocresía, cinismo, desvergüenza y ventilador», porque «la única explicación posible es que colaboraron en la trama permitiendo que los corruptos se llevaran el dinero de los ciudadanos».

Por ello, Costa ha asegurado que Armengol «no puede continuar ni un minuto más en su actual cargo» de presidenta del Congreso. Tras su intervención los diputados del PP se han puesto de pie para aplaudirle.

UNA «FABULACIÓN» CONTRA ARMENGOL FABRICADA «DESDE GÉNOVA»

Mientras, el PSIB ha afirmado que se ha fabricado «desde la calle Génova» una «fabulación» contra la expresidenta Francina Armengol, «a partir de fragmentos seleccionados del expediente» y «piezas que no encajan», en palabras del socialista Damià Borrás.

Mercedes Garrido ha abundado en que Armengol «no sale en el expediente» a diferencia del portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, por lo que los socialistas han reclamado aclarar si éste medió para que representantes de la empresa se reunieran con responsables del Govern.

«También había una señora política de Baleares de la cuerda de Pablo Casado, no sé si es M.P.», ha lanzado Pilar Costa, en una referencia velada a la presidenta Marga Prohens. Los diputados del PSIB han incluido también al presidente popular , Alberto Núñez-Feijóo, por las referencias «a un tal Alberto» en los pinchazos teléfonicos sobre las gestiones de Koldo García respecto a la reclamación.

«Si la persona de máxima confianza de Alberto Núñez Feijóo quiere hablar con al Govern, ¿a quién llama? ¿Marca el nombre de la centralita del Consolat?», ha sugerido Borràs, que ha añadido: «¿Cuántos Albertos hay capaces de poner un expedientre dentro del cajón del canterano de Prohens?»

En sus turnos, los socialistas han reclamado al Govern que demuestre documentalmente que el expediente no ha caducado, facilitando la resolución del IbSalut de la que se habla en el sumario. «No lo ha querido mostrar», ha afirmado Marc Pons.

El PSIB también ha urgido al Govern a informar de si el expediente se ha enviado al Consell Consultiu para que se pronuncie, ya que sería un trámite necesario para interponer la reclamación en un Juzgado.

EL CASO KOLDO, TEMA CENTRAL EN LA SESIÓN DE CONTROL

El caso Koldo ha sido el tema central en la sesión de control ya que incluso en preguntas que no estaban relacionadas con la materia los diputados y consellers han incluido alusiones al escándalo.

«El PSOE está dando pasos agigantados con el acceso de los jóvenes a la vivienda, el hijo de Koldo se compró un piso solo en dos años», ha deslizado la consellera Marta Vidal ante una pregunta del diputado Llorenç Pou sobre vivienda.

También Manuela Cañadas, de Vox, ha dedicado al caso Koldo buena parte de sus minutos originalmente destinados a una pregunta sobre educación. «Esta semana hemos entendido que este gobierno de izquierdas ha estado más preocupado por llevarse comisiones y por la trama de corrupción que por las necesidades y prioridades de todos los alumnos y educadores de las Islas, estaban más interesados en hacerse millonarios a costa del pueblo balear», ha dicho.

La socialista Amanda Fernández, por su parte, protestaba al inicio de su pregunta sobre declaraciones de bienes por el volumen empleado por el vicepresidente Costa justo antes, en la pregunta anterior: «Los micros funcionan, los escuchamos perfectamente, están muy nerviosos».

Todo ello, mientras en los escaños situados detrás de varios de los consellers, los diputados de Vox agitaban carteles con el lema #corruPSOE cuando se hablaba sobre el caso.

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