La compañía biotecnológica Galapagos, especializada en I+D, llega a España
La compañía biotecnológica Galapagos, especializada en I+D, ha iniciado su andadura en España, sumándose así a los nueve países en los que la biotecnológica está ya presente. Con sede central en Bélgica, la compañía cuenta con tres centros de investigación en Europa, 20 años de recorrido y más de 1.000 empleados en todo el mundo. En España, su sede se ha ubicado en Madrid.
En la rueda de prensa de presentación de la llegada de la compañía a España, su director general, Carlos Hoyo, ha anunciado que Galapagos ya cuenta con un equipo de 25 personas en nuestro país, aunque se esperan más contrataciones. «Esto es solo el principio, prevemos más incorporaciones y esperamos cerrar 2021 con 50 personas», ha subrayado.
«Es un placer para mí liderar en España la transformación de Galapagos en una compañía integral. Además de mantener nuestros esfuerzos en investigación, hemos dado el paso de comercializar nuestros tratamientos. En este sentido, España ha sido uno de los primeros países elegidos para su expansión», ha comentado.
Hoyo ha destacado que la I+D es el eje central de la compañía; de hecho, el 80 por ciento de los empleados de Galapagos trabaja en este área. Desde 1999, la compañía ha invertido un 78 por ciento de los gastos operacionales en I+D y ha sido capaz de sintetizar más de 40 moléculas preclínicas propias, candidatas al desarrollo clínico.
El objetivo de Galapagos es investigar para encontrar medicamentos con nuevos mecanismos de acción que traten la raíz de las enfermedades y no solamente los síntomas. Para ello, han desarrollado una plataforma de investigación propia que sitúa a la compañía a la vanguardia de la biotecnología.
INFLAMACIÓN Y FIBROSIS, ÁREAS TERAPÉUTICAS PRIORITARIAS
El director médico de Galapagos España, Fernando Osorio, ha explicado en qué consiste esta plataforma que lleva 20 años en funcionamiento. «Nosotros trabajamos con muestras de células humanas de pacientes enfermos. Los genes de estas células pueden expresar de manera defectuosa una serie de proteínas que pueden provocar inflamación. A lo largo de estos años de investigación lo que hemos hecho ha sido desarrollar un catálogo de más de 6.000 adenovirus que introducimos en estas células humanas de pacientes enfermos con el fin de silenciar determinados genes», ha detallado.
De esta forma, descubren aquellas proteínas que «están jugando un papel clave en la causa de la enfermedad». «A estas proteínas las llamamos dianas. A continuación, trabajamos para desarrollar pequeñas moléculas, es decir, potenciales medicamentos, que ralenticen o supriman las proteínas diana , con el objetivo de abordar directamente la raíz de la enfermedad y no sólo sus síntomas», ha agregado.
Esta plataforma ha permitido a Galapagos, entre otros, desarrollar una molécula que ha recibido recientemente la aprobación de la Comisión Europea como una nueva opción terapéutica para los pacientes de artritis reumatoide, y que será comercializada en Europa por Galapagos en colaboración con su socio Gilead Sciences. «Ya estamos trabajando para que llegue pronto a los pacientes españoles», ha avanzado Hoyo.
Se trata de un fármaco oral, de una toma diaria, y es un inhibidor preferente de JAK1, una vía de señalización celular. Los inhibidores JAK son pequeñas moléculas capaces de atravesar la membrana de las células e inhibir de forma más o menos específica diferentes vías de señalización, implicadas en enfermedades como la artritis reumatoide.
Además de los avances en artritis reumatoide, Osorio ha apuntado que la investigación de Galapagos se centra principalmente en enfermedades inflamatorias y fibrosis pulmonar. En este sentido, ha apuntado que tienen dos moléculas en proceso de desarrollo que «han mostrado resultados muy prometedores para los pacientes y actualmente se encuentran en una etapa avanzada de la investigación».