La comisaria europea de Salud subraya que salud física y mental es «una sola cosa» y aboga por trabajar en la prevención

LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, 28

La comisaria europea de Salud, Stella Kyriakides, ha subrayado este viernes que la salud física y mental es «una sola cosa», reconociendo los «retos» a los que se enfrentan las personas que los sufren, y abogando por trabajar en la prevención en este área con todos los países miembros de la UE.

Para ahondar en este tema avanzó, en la rueda de prensa que se ha celebrado tras concluir la Reunión Informal de ministros de Sanidad de la Unión Europea (UE), que se desarrolla por la Presidencia española del Consejo de la UE en Las Palmas de Gran Canaria, que en el mes de octubre se reunirán para seguir trabajando e intercambiar buenas prácticas sobre salud mental poniendo el foco en las personas más vulnerables –niños, adolescentes o personas mayores–.

La comisaria, matizó, que hay que trabajar «no» solo en el acceso a los servicios, sino en la «prevención y prevención precoz» porque afirmó que la salud mental «es importante» y es una cuestión que hay que hablar porque «no es ningún problema tener problemas de salud mental». Al respecto, indicó que se han puesto en marcha 35 acciones y 1.200 millones de euros de financiación.

En cuanto al papel que juega España en abordar la salud mental, Stella Kyriakides ha indicado que hace un mes estuvo en España visitando un centro de llamadas de emergencias para personas con depresión y comportamientos suicidas, la línea 024, resaltando «el compromiso y pasión» de las personas que trabajan en el mismo.

Esta línea telefónica, puntualizó por su parte el ministro de Sanidad en funciones del Gobierno de España, José Miñones, servirá para que aporte conocimiento sobre la salud mental y poder trabajar sobre ello, trasladándolo además a los países miembros.

REFORZAR LAS CAPACIDADES DEL SISTEMA

Miñones ha destacado, por su parte, que ha habido consenso en el rumbo a seguir en la construcción de la Unión Europea (UE) de la salud, reforzando las capacidades de los sistemas sanitarios, cuestión que dijo es «clave» al igual que para abordar el reglamento del estado europeo de datos de salud para que los ciudadanos puedan tener una asistencia «de calidad».

En relación a esto último resaltó la implementación de las nuevas tecnologías para atender la salud desde un prisma integral, apuntando que en este caso les debe marcar el derecho de los ciudadanos a tener garantía, así como que dicho reglamento permita impulsar la investigación e innovación.

Añadió que el objetivo es aprovechar la «oportunidad que ofrecen los datos de salud para mejorar los servicios» atendiendo siempre a la protección de los derechos, que hay que «ser capaces de asegurar» en el manejo de los mismos «a gran escala».

Sobre esto último, la comisaria europea expuso que el objetivo es que los ciudadanos tengan «más acceso y control» sobre sus datos, mientras que los profesionales puedan «entender globalmente» la salud de los pacientes y que permita crear un espacio jurídico sólido para tener nuevos productos sanitarios. Además de incluir una vía para reforzar la inteligencia artificial relacionado por ejemplo con la lucha contra el cáncer.

De todos modos, puntualizó que habrá «muchos» debates sobre la salud digital pero aseguró que en lo que se trabaja «no supone socavar la protección de datos».

ESTRATEGIA FARMACÉUTICA

La estrategia europea farmacéutica es otro de los temas que se han abordado en esta reunión para lo que se pretende impulsar el primer documento de recomendaciones en el mes de octubre con el objetivo de aprobarlo durante la Presidencia española de la UE, según indicó Miñones, que matizó que se trabaja en incluir un listado de medicamentos «claves», entre los que estarían incluidos los de enfermedades raras.

Asimismo la comisaria europea de Sanidad, Stella Kyriakides, incidió en que en la estrategia del medicamento «no» empiezan desde cero y como ejemplo puso la vacunación contra la Covid-19, donde se «demostró la importancia» de la solidaridad aunque admitió que también se vieron las vulnerabilidades en el abastecimiento, de ahí que se busque ahora esta reforma farmacéutica que hacía 19 años que no se modificaba

Todo ello, además, porque afirmó que hasta ahora se tiene en Europa «medicinas seguras pero no» un mercado «seguro», ya que matizó se sabe que hay pacientes con enfermedades raras que «no» tienen acceso pero para ello habrá incentivos a los que podrán acceder las empresas con el fin de fomentar la innovación sobre medicamentos de enfermedades raras.