La autopista canadiense de Ferrovial multiplica por seis su beneficio hasta junio por la mejora del tráfico
Ferrovial incorpora a su consejo de administración al director de activos de su filial Cintra en Países Bajos, Juan Ramón Pérez
La autopista 407 ETR, considerada la mayor autopista en concesión del mundo y participada al 43% por Ferrovial, ganó 110,1 millones de dólares canadienses (84 millones de euros) en los primeros seis meses del año, lo que supone un incremento de casi el 500% respecto al mismo periodo del año pasado.
Con la recuperación del tráfico tras el levantamiento de las restricciones, la compañía ya se aproxima a las cifras que registraba antes de la pandemia, cuando ganó en el primer semestre de 2019 en torno a 112 millones de euros, un 33% más que ahora.
Los ingresos en esta primera mitad del año 2022 ascendieron a 336 millones de dólares canadienses (256 millones de euros), un 58% más que en 2021, pero aún un 14% por debajo de los de 2019. El resultado bruto de explotación (Ebitda), de 294 millones de euros, fue un 64% más que hace un año aunque un 15% menor que antes de la crisis sanitaria.
En cuanto al tráfico, este creció un 48% en comparación con el que se registraba en la primera mitad del año pasado, pero comparándolo con el de 2019 aún se encuentra un 19% por debajo. En cualquier caso, la compañía defiende contar con la suficiente liquidez para atender todas sus obligaciones.
Asimismo, el consejo de administración ha aprobado el reparto de un dividendo de 0,258 dólares canadienses por acción, pagadero el próximo 14 de julio para todos los accionistas de la empresa en esa fecha.
Por otra parte, la compañía también ha confirmado el nombramiento de dos nuevos miembros del consejo de administración, en concreto del actual director de activos de Cintra, filial de Ferrovial, Juan Ramón Pérez, y de Emmie Fukuchi, vicepresidenta ejecutiva de The Co-Operators Group, que fueron efectivos el pasado 1 de mayo.
Ferrovial logró esta concesión en 1999 para un periodo de 100 años. Hasta 2019 tenía el control de la sociedad al contar con la participación mayoritaria, pero el tercer accionista (SNC Lavalin) le vendió al primero (el fondo de pensiones de Canadá) un 10%, por lo que éste pasó a ostentar más del 50% del total.