El presidente de Kosovo asegura que renunciará al cargo si se confirma la acusación por crímenes de guerra
El presidente de Kosovo, Hashim Thaci, ha asegurado este lunes que renunciará a su cargo si se confirma la acusación de crímenes de guerra y contra la Humanidad de la Fiscalía del Tribunal Especial para Kosovo.
«Si se confirma la acusación, renunciaré inmediatamente como presidente y me enfrentaré a los cargos», ha dicho Thaci durante una comparecencia televisada, recogida por el diario local Koha Ditori .
La Fiscalía del Tribunal Especial para Kosovo ha acusado de diez cargos de crímenes de guerra y contra la Humanidad al presidente de Kosovo, como supuesto responsable de cerca de un centenar de asesinatos de albanokosovares, serbokosovares, gitanos y miembros de otras etnias en la última guerra (1998-1999).
«Kosovo es un nuevo estado, pero sus líderes deben comportarse como verdaderos estadistas. Soportaré esta carga y me defenderé», ha agregado el mandatario, que ha precisado que «en los próximos días» consultará con los líderes políticos del país «sobre pasos adicionales».
En la comparecencia, Thaci ha criticado que la Unión Europea ha actuado, a su juicio, con un doble rasero en lo que respecta a Kosovo y Serbia y ha insistido en que ha apoyado iniciativas que buscaban la creación de tribunales para juzgar crímenes de guerra.
Las acusaciones contra Thaci llegan en medio de los esfuerzos por relanzar el diálogo entre Belgrado y Pristina para que los vecinos normalicen sus relaciones. A raíz de estas acusaciones, Thaci decidió no acudir a la reunión prevista en Washington junto al presidente serbio, Aleksandar Vucic, donde iban a reanudar oficialmente el diálogo.
«Ninguna buena intención y ninguna gran voluntad de justicia justifica la fabricación de una bomba mediática para incriminar a Kosovo, precisamente en el momento en que el diálogo con Serbia había entrado en una nueva fase gracias al compromiso directo de la Casa Blanca», ha detallado, al tiempo que ha valorado que la acusación ha dado «un fuerte golpe» a la «posibilidad de lograr la paz entre Kosovo y Serbia».
