La ASEAN tilda de «altamente destructivas» las ejecuciones de cuatro activistas por parte de Birmania
La Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) ha tildado este martes de «altamente destructivas» para los avances cosechados en la región las ejecuciones de cuatro activistas perpetradas por la junta militar birmana el lunes y ha señalado que este tipo de prácticas son «profundamente decepcionantes».
La organización, formada por una decena de países entre los que también se encuentra Birmania, ha condenado las ejecuciones, así como la forma en que se han llevado a cabo y el momento, justo una semana antes de la próxima reunión de la ASEAN.
«Mientras que la complejidad de la crisis ha sido reconocida y se puede sentir el clima bélico extremo en todas las partes del país, la ASEAN en su conjunto ha pedido la mayor de las contenciones», recoge la asociación, que actualmente presiden Camboya, en un comunicado.
Así, el texto señala que «la implementación de estas penas de muerte antes de la reunión ministerial de la ASEAN es reprochable» y sostiene que demuestra una «gran falta de voluntad» por parte de Birmania a la hora de abordar el diálogo entre la junta y sus oponentes políticos.
Las autoridades malasias, por su parte, han calificado las acciones como un crimen contra la humanidad y han condenado las sentencias. El ministro de Exteriores del país, Saifudin Abdulá, ha aseverado durante una rueda de prensa que la organización debería impedir el envío de representantes por parte de Birmania.
Los cuatro hombres ejecutados se encontraban entre los más de un centenar de activistas que han sido condenados a muerte en el país desde el golpe de Estado de febrero de 2021.
El lunes, el Gobierno estadounidense instó a las autoridades chinas a aumentar la presión sobre Birmania tras las ejecuciones. El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, indicó que China podría «influir» en Birmania «más que cualquier otro país».
«Eso es lo que pedimos a los países del mundo, que hagan más. Nosotros haremos más también», ha aclarado. Sin embargo, el gigante asiático insiste en no interferir en lo que considera como asuntos internos de otros países.
Para Washington, es necesario acabar con «los negocios, tal y como se venían realizando» antes de que la junta llegara al poder y ha pedido a los países que bloqueen la venta de equipamiento militar al país asiático.