La arteterapia es una herramienta eficaz para ayudar a personas que sufren trastornos de la conducta alimentaria
La arteterapia es una herramienta eficaz para ayudar a personas que sufren trastornos de la conducta alimentaria, según ha comentado la directora de la Unidad de Arteterapia de Instituto Centta, Cristina Ramos, con motivo del Día Europeo de la Arteterapia, una iniciativa que parte de la Federación Europea de Arteterapia (EFAT) en su afán por visibilizar y dar a conocer la profesión y fomentar que el arte ayuda a mejorar el bienestar.
«Venimos apostando por la Arteterapia desde nuestros inicios, ya que la consideramos una pieza fundamental para el tratamiento de los aspectos emocionales de nuestros pacientes, y más concretamente de aquellos que acuden a la Unidad de Trastornos de Conducta Alimentaria», ha dicho.
Para estas pacientes, prosigue, la Arteterapia les brinda la oportunidad de expresar sus emociones, de contar sus historias y presentar su realidad a través de la creación artística. De esta manera, conseguimos salir del relato habitual de enfermedad para poner el acento en la capacidad y la salud, en lo que sí pueden hacer. El arte, con sus múltiples lenguajes, nos permite dialogar y poner en juego todas las partes que componen nuestra identidad», asegura la arteterapeuta.
Y es que, el trabajo artístico surge como un espacio de posibilidad para reconectar con la capacidad y el deseo a través del placer estético y el encuentro terapéutico en un plano de colaboración, acompañamiento sin juicio y sostén emocional», añade . La presencia de la arteterapeuta que es testigo del proceso creativo actúa como espejo para ayudar a la persona a rescatar los saberes que la experiencia le puede brindar.
«Para muchas de nuestras pacientes, el espacio de arteterapia es el lugar donde integrar y reelaborar las cuestiones que aparecen a lo largo del tratamiento psicológico, pero también el espacio en el que toman consciencia de aspectos inconscientes a través de sus producciones artísticas y su relato», ha enfatizado.
Una de las pacientes de Instituto Centta afirma que la arteterapia por un lado me ha permitido reencontrarme con algo que había olvidado que disfruto, que me permite expresarme sin intentar encontrar la palabra correcta, que me hace desconectar y que me deja dar espacio a una niña interior que desde hace mucho tiempo tenía castigada en silencio en un rincón.
«No se trata de dibujar bien o mal, se trata de expresar por medio del arte eso que no eres capaz de expresar de otra manera. La arteterapia te hace desconectar de lo de alrededor, pero te hace conectar contigo mismo y ese punto es básico. Porque la parte de desconectar ha estado ahí mucho tiempo, pero la de además conectar contigo interiormente me hacía falta entrenarla. Creo que la arteterapia me ha permitido también eso», ha zanjado.