La alcaldesa de Gijón anuncia que no se presentará a las primarias del PSOE tras
«He perdido y la Ejecutiva ha ganado», reconoce González, que volverá a su trabajo de profesora cuando acabe el mandato
GIJÓN, 16
La regidora gijonesa, Ana González, ha avanzado este viernes que no se presentará a la convocatoria de primarias del PSOE gijonés una vez que los promotores de las firmas reunieran más de las 592 exigidas por Ferraz –662 validadas por la Federación Socialista Asturiana (FSA)–.
«He perdido y la Ejecutiva ha ganado», ha reconocido González, en rueda de prensa en el Consistorio, arropada del resto de ediles socialistas del Equipo de Gobierno, a excepción de Marina Pineda, Natalia González y José Ramón Tuero.
Se ha mostrado segura, eso sí, que el próximo candidato del PSOE a los comicios locales de 2023 liderará un «buen equipo» y ganará las elecciones.
«Feliz no estoy, quería ganar», ha confesado la alcaldesa, quien ha incidido en que es la rueda de prensa más difícil que ha tenido que dar. Esta ha apuntado que cuando se presentó a las primarias para ser cabeza de cartel en 2019 ya había dicho que era por dos mandatos y le gusta ser coherente y mantener lo que dice.
No obstante, ha indicado que cuando se pierde, «tienes que encajarlo». «No valen rencores», ha agregado la regidora, quien ha remarcado que no importa el número de votos conseguidos una vez que ya son suficientes para convocar primarias.
Ha querido agradecer, entre otros, a los concejales que en este día la han acompañado en la rueda de prensa, por su «apoyo y lealtad», y también por su compromiso centrado en Gijón. «Las victorias se comparten y las derrotas se asumen en soledad», ha indicado, a lo que ha señalado que por eso es de agradecer que la acompañen.
González ha dejado claro que no pidió a ningún concejal que la apoyara ni preguntó su posición en este proceso de recogida de firmas, convencida de que todos, como afiliados, tienen derecho a opinar. Ha indicado, asimismo, que cuando se hizo la lista electoral se pensó en la integración de las dos posturas que había, porque había una «quiebra» en la Agrupación Socialista.
Sobre esta cuestión, ha señalado que hay una serie de concejales que desde el inicio le manifestaron su apoyo y la acompañan. «Esta rueda de prensa no es fácil», ha insistido, a lo que ha reiterado su agradecimiento por que estén con ella, aunque le hubiera gustado que los otros tres también la acompañaran.
De igual forma, ha querido agradecer a los vecinos de Gijón los apoyos recibidos durante el mandato, y en especial este último mes y medio desde que salió a la luz la petición de primarias.
Para ella, lo importante es ser consciente del resultado y asumirlo «con tranquilidad, sin rencor y sin dobleces». Por ello, ha indicado que llamó a la Ejecutiva local para decirles que habían ganado y también comunicó su decisión de no presentarse a las primarias al presidente de la FSA, Adrián Barbón, a su vez presidente regional, con el que ha quedado en verse el próximo lunes.
Preguntado sobre si cree que ha influenciado algo el hecho de que ella no es de Gijón, ha resaltado el espíritu de apertura de la ciudad, a lo que ha sostenido que se sintió «bien acogida». A su juicio, es «anecdótico» el que haya habido algunas críticas por esa cuestión.
En cuanto al desarrollo del proceso de recogida de firmas, ha opinado que «cuando hay posturas distintas en un partido el lenguaje se convierte en demasiado beligerante, pero algunas personas han dado un salto a lo personal que no comparto».
También ha rechazado que se sienta decepcionada con el resultado. «Quería ganar, pero no me siento decepcionada», ha matizado. En este sentido, ha incidido en que no se puede sentir decepcionada después de ganar las elecciones, tras dos mandatos en los que el PSOE no consiguió la Alcaldía, y después de conseguir cuatro concejales más en elecciones y de un Gobierno que ha respondido «bien» a cosas «tan terribles» como la pandemia de la COVID-19.
Sobre qué hará una vez que acabe el mandato, ha adelantado que se incorporará a su profesión como profesora. Y si bien ha asegurado que a ella le gusta mucho la política, ha precisado que no tiene interés en este momento de tener un cargo. Ha insistido en que no busca «salir de un sitio para ir a otro».
Ha remarcado que ella es profesora, que es lo que decidió desde muy joven. «No estoy ahora mercadeando la Alcaldía con nada», ha insistido. Al tiempo, ha afirmado que es «bastante buena profesora»., ha apuntado, y de hecho, ha destacado los mensajes de apoyo recibidos de ex alumnos.
Sobre la FSA, ha enfatizado que es el órgano de Gobierno del PSOE de Asturias, «no de Ana González», ha dejado claro. Por este motivo, ha opinado que la FSA debe cumplir con ese papel e, independientemente de que le gusten más unos u otros, no puede interferir desde lo personal en una cuestión orgánica.
Eso sí, ha recalcado que no tiene intención de dimitir y, respecto a los ediles que la acompañan, ha señalado que es una decisión de cada uno de ellos, aunque no cree que lo hagan. La alcaldesa ha incidido en que no ha pensado en dimitir «una cosa es los votos de la calle y otra el partido», a lo que ha animado a no confundir lo orgánico con lo presencial.
González tampoco ha visto relación entre algunas sentencias que han anulado decisiones del Gobierno local, la más reciente relativa a la adjudicación del contrato de renaturalización del río Piles que suprime el anillo navegable, con la petición de primarias.
Ha recordado, en este caso, que al PSOE, en mandatos anteriores, se le anularon varios planes de ordenación. Sí que ha dicho ser consciente de que «cuando se gobierna, también te desgastas», ha apuntado.
DEFENSA DE LA ACCIÓN DE GOBIERNO
Unido a todo ello, ha considerado que hay un programa electoral que es un compromiso, un pacto con IU que hizo que fuera más fácil gobernar y acuerdos con otros grupos municipales. Sí que ha precisado que se está viviendo un mandato que es «absolutamente singular».
González ha puesto de ejemplo que cuando se dijo el año pasado que se iba a sacar el programa Bonos Gijón, todo el mundo se puso en contra, según ella, si bien fue uno de los impulsos mayores al comercio y hostelería, a su criterio.
Ha recalcado, además, que no pasa nada porque haya posiciones diferentes en la ciudad, pero cree que no hubo un rechazo «unánime» a las decisiones adoptadas.
Respecto a si a partir de ahora se verá una mayor influencia del PSOE en las decisiones del Ayuntamiento, ha señalado que los gobiernos pertenecen a un partido y hablan con ellos.
Preguntada si afectará al Plan de Movilidad, ha recalcado que es obligatorio tenerlo a fecha de 1 de enero de 2023, y que hay cosas como la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que deben de estar incluidas. «No podemos dejar tirada a la ciudad y ponerla en un problema», ha advertido González.
En cuanto a si debería ya incluirse de oficio en los Estatutos del partido la celebración de primarias, ha explicado que el PSOE cada cuatro años hace congresos y se pueden cambiar en ellos las cosas. Ha apostillado, a este respecto, que no está bien no decirlo y una vez aprobados, comentarlo. Para ella, el partido tiene una forma de trabajar que es «correcta», por lo que deberían implicarse los afiliados y hacer cambios en los congresos si es lo que quieren.