La Agrupación de Reservas de la Guardia Civil realiza más de 7.000 servicios de apoyo durante la pandemia
La Agrupación de Reserva y Seguridad (ARS) de la Guardia Civil ha realizado más de 7.000 servicios de apoyo a las unidades de seguridad ciudadana de la Benemérita en la crisis del coronavirus y ha desplegado numerosos dispositivos para evitar posibles desplazamientos no autorizados durante fechas señaladas como Semana Santa o los puentes de mayo.
La ARS es la principal unidad de reserva de la Guardia Civil, especialmente concebida, preparada y organizada para cumplir la misión específica de prevención, mantenimiento y, en su caso, restablecimiento de la seguridad pública. Está diseñada por su empleo temporal en apoyo a otras unidades.
La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, se ha reunido este martes con responsables de la Agrupación de Reserva y Seguridad, del GRS 1 y del Escuadrón de Caballería para conocer de primera mano el trabajo que han llevado a cabo, especialmente, durante el Estado de Alarma.
Según ha informado el Cuerpo en un comunicado, Gámez ha resaltado la importancia de contar con unidades de reserva como la ARS, que se ha mostrado «absolutamente versátil para desempeñar funciones diversas» durante el estado de alarma por la crisis del coronavirus.
La directora general de la Guardia Civil ha destacado que esta unidad «ha tenido que adaptar sus procedimientos habituales operativos para dar un apoyo fundamental al resto de unidades del Cuerpo, especialmente las de seguridad ciudadana».
PROTECCIÓN DE FARMACIAS Y COMERCIO MINORISTA
La ARS ha desarrollado su actividad durante los meses del estado de alarma con el objetivo de garantizar el cumplimiento de la normativa de confinamiento, asistencia presencial a colectivos especialmente desprotegidos y la protección de farmacias y comercio minorista ante posibles robos. También han colaborado, en este caso, el GRS4 de Barcelona en la puesta en marcha de un hospital de campaña en Sant Andreu de la Barca.
A medida que se han ido desarrollando las diferentes fases de desescalada y se ha ido volviendo a una cierta movilidad de la ciudadanía, la ARS ha vuelto a ser requerida para desempeñar sus misiones habituales como son el apoyo a unidades de investigación en el desarrollo de operaciones policiales.
También se ha retomado la vigilancia de las Centrales Nucleares de las que se ha encargado durante estos meses el Ejército, dentro de la Operación Balmis, y han participado en operativos como la búsqueda del denominado «rambo de Requena», la vigilancia en Galicia dentro de la campaña de prevención de incendios, o el mantenimiento del orden público en el partido de fútbol Levante-Sevilla, entre otros.