Jupol estudia acciones legales por el sacrificio de un caballo de la Policía
El sindicato Justicia Policial (Jupol) ha informado del sacrificio de un caballo por lo que están estudiando medidas legales por si los hechos que han llevado a la eutanasia fueran constitutivos de un presunto delito de maltrato animal por parte de la Dirección General de la Policía (DGP).
El animal sacrificado ha sido el caballo estandarte de la Unidad de Caballería de Sevilla de la Policía Nacional, Pomo, que sufrió un accidente prestando servicio el pasado 4 de septiembre.
Jupol ha indicado en un comunicado que el caballo se lastimó una de sus extremidades pudiendo observarse hueso y tendones a través de la herida abierta y «fue desplazado a su box, y pese a la gravedad del accidente, transcurrieron cinco días hasta realizarle la primera radiografía para valorar el alcance de la lesión».
«La primera y única opción que dieron los servicios veterinarios de la DGP era el sacrificio al no ser apto para el trabajo policial, a pesar de haber veterinarios externos dispuestos a operarle por considerar que la cirugía era posible y que el caballo podría tener una vida y una jubilación digna tras la misma», ha explicado el sindicato.
Según Jupol, personas externas a la DGP solicitaron hacerse cargo del animal, así como de los costes de la cirugía y recuperación.
También han denunciado que «desde la DGP no le prestaban el tratamiento urgente que necesitaba» manteniendo al caballo durante 23 días en su box «obligándole a apoyarse en solo tres de sus extremidades ignorando las graves consecuencias para su salud, como la sobrecarga en sus extremidades, y sus necesidades etológicas básicas».
Pomo fue trasladado al Hospital Veterinario de la Universidad Alfonso X El Sabio en Madrid para someterse a la cirugía, tras la que «se estaba recuperando satisfactoriamente y pudo comenzar a apoyar la extremidad lesionada».
UN INFORME VETERINARIO FAVORABLE
Jupol ha explicado que, 18 días después de la intervención, el informe veterinario indica que hubo una complicación debida a «la sobrecarga a la que fue sometida la extremidad opuesta en las últimas semanas» y derivó en una infosura.
Desde el sindicato denuncian que a pesar que el informe veterinario indicaba que «la reparación de la fractura seguía estable», se tomó la decisión de realizar una eutanasia por motivos veterinarios, por su mal pronóstico y evitar el sufrimiento del caballo.
Jupol ha declarado que consideran que los animales forman parte de las unidades y «deben recibir un trato ético y profesional, en consonancia con los valores de la Policía Nacional».
«Tomar decisiones que implican el sacrificio de un animal por motivos de funcionalidad o incapacidad temporal podría ser interpretado como una forma de maltrato, contraria a las políticas actuales de bienestar animal promovidas tanto por la legislación española, europea y como por la sensibilidad de la sociedad», han expresado desde el sindicato.
Los servicios jurídicos de Jupol han declarado que estudiarán el caso y, si así lo concluyeran, exigirán responsabilidades a la DGP, «quienes deberían haber actuado cumpliendo con el código deontológico veterinario y tratando a sus animales, que son nuestros compañeros, como seres sintientes y no como meros objetos».