Junts insiste en que el imán de Ripoll era confidente del CNI y pedirá responsabilidades al Gobierno
Junts considera que los documentos desclasificados del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) que se han enviado a la comisión del Congreso que investiga los atentados yihadistas de 2017 confirman que el imán de Ripoll y cabecilla de la célula terrorista fue confidente de los servicios secretos, por lo que ya avisa de que pedirá responsabilidades al Gobierno.
Esos documentos, recogidos por Europa Press, lo que confirman es que agentes del CNI hablaron con el imán de Ripoll cuando estaba en prisión, casi tres años antes de la masacre, y acabaron descartándole como confidente por ser un individuo muy opaco y desconfiado que no daba «ninguna fiabilidad».
Para la formación independentista, «la desclasificación de los documentos del CNI confirma la tesis de que Es Satty era confidente de los servicios secretos españoles y que los responsables del CNI conocían perfectamente esta figura, pero no actuaron con la diligencia necesaria para evitar los atentados».
Según subraya la portavoz de Junts, Miriam Nogueras, «el imán tenía un expediente de expulsión abierto que no llegó a ejecutarse porque colaboraba con la Guardia Civil a cambio de no devolverlo a su país de origen», lo que a su juicio puso en riesgo la seguridad de todos.
Con todo ello, Junts se promete a «estudiar a fondo toda la información disponible para extraer las conclusiones pertinentes y exigir las responsabilidades que se deriven».
