Julio fue un mes muy seco y cálido en Cantabria, con 18,4 grados de media, según la AEMET
Cantabria tuvo un mes de julio «cálido» y «muy seco», con 18,4 grados de media, un 0,6% por encima del valor medio, y con 26,4 litros por metro cuadrado de lluvia recogida en el promedio regional, lo que supone un 53% de lo esperado, según datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).
El pasado julio fue el decimocuarto más seco de la serie histórica ordenada desde 1961.
El año hidrológico en curso, que va desde octubre de 2022 hasta el 1 de agosto de 2023, también mantiene el carácter muy seco, y aumenta ligeramente el déficit que acusaba el mes pasado, hasta el 22%.
Por ahora se llevan recogidos 871,4 litros por medio cuadrado, cuando por estas fechas se habían alcanzado ya los 1.115 en el promedio.
La precipitación fue escasa en términos generales, aunque estuvo presente con cierta regularidad a lo largo del mes en el litoral y en los valles orientales de la vertiente cantábrica.
Concretamente se registraron 19 días de lluvia en San Roque de Riomiera-Caracol; 15 en Liérganes, Santander o Tresviso; 14 en Bárcena Mayor-Toriz, 12 en Villacarriedo y San Vicente de la Barquera y 11 en Torrelavega y San Felices de Buelna.
Sin embargo, en Liébana se anotaron solo dos días de lluvia en Tama; y en Campoo-Los Valles, tres en Nestares y uno en Cubillo de Ebro y en Polientes.
Los mayores registros de precipitación recogida en 24 horas fueron los 18,8 litros por metro cuadrado del día 24 en San Roque-Caracol; 17 en Nestares el día 12 y los 15 de Altamira el 23.
Las temperaturas han oscilado en torno a los valores normales, pero fueron más cálidas, para la época del año, durante la primera quincena que durante la segunda.
El día 7 fue el más caluroso, con registros por encima de 30 oC en Castro Urdiales, Ramales, Villacarriedo, Terán, San Felices, Tama, Nestares, Mataporquera, Cubillo de Ebro, entre otras estaciones meteorológicas.
El día 14 se repitieron las altas temperaturas, aunque menosgeneralizadas, y descendieron luego hasta quedar las máximas por debajo de 25 grados el resto del mes.
En la estación meteorológica del aeropuerto Seve Ballesteros se registraron 189 horas de sol, un valor que prácticamente coincide con el valor medio de insolación esperado el mes de julio, de 191 horas.
El viento, en el mismo observatorio, recorrió 7.675 kilómetros, una cifra que coincide prácticamente con el valor medio esperado de 7.603. Sin embargo, fueron más frecuentes de lo normal los vientos de oeste y suroeste, y menos los del nordeste.
Además, se registraron 78 descargas procedentes de tormenta los días 6, 7 y 12. La mayor actividad se concentró el día 7 con 37 descargas registradas.
Durante todo el mes, la situación sinóptica se ha caracterizado por una ligera circulación zonal al norte del Cantábrico, y la presencia de un núcleo anticiclónico en el Atlántico cuyo centro ha basculado entre las islas Azores y las islas británicas.
En estas condiciones, se han alternado periodos en los que el anticiclón se extendía en cuña sobre la región, con otros en los que su desplazamiento permitió la llegada de frentes debilitados opoco activos y precipitaciones.
VALORES EXTREMOS
La temperatura máxima más alta en Cantabria en el mes de julio se registró el día 7 Tama, con 37,2 grados; mientras que la mínima más baja fue de 3,8 grados el día 28 en el mirador del Cable.
La máxima precipitación recogida en 24 horas fue de 18,8 litros por metro cuadrado el día 24 en San Roque-Caracol y la racha máxima de viento fue de 100 kilómetros por hora el día 18 en Mirador del Cable.