José del Valle, exdirectivo de Telefónica ahora en STC, lamenta la muerte de Alierta y destaca su liderazgo

El exconsejero delegado de Telefónica Media Latam & Infrastructure y actual jefe de Proyectos Especiales del grupo saudí STC –compañía que irrumpió en el capital de la operadora española el pasado septiembre–, José del Valle, ha lamentado el fallecimiento del que fuera presidente de Telefónica entre los años 2000 y 2016, César Alierta, y ha destacado, entre otras cosas, su capacidad de liderazgo.

«Fue realmente un honor ser parte de su equipo y ser testigo de primera mano de los notables logros que logró durante su mandato. Bajo su liderazgo visionario, Telefónica se elevó a nuevas alturas, alcanzando la asombrosa cifra de 100.000 millones de euros en capitalización bursátil, consolidando su estatus como un faro de éxito no solo dentro de España sino también en el escenario mundial», ha señalado el directivo en su perfil de Linkedin.

José del Valle también considera que el impacto de Alierta se extendió «mucho más allá» del ámbito del «éxito corporativo» y se convirtió en un «modelo a seguir para muchos españoles y profesionales» dentro del sector de las telecomunicaciones.

«Su dedicación y compromiso inquebrantable con el crecimiento y la innovación fueron evidentes en cada decisión que tomó, encendiendo una cultura de excelencia que impregnó toda la organización. La claridad de su visión estratégica y su capacidad para inspirar y motivar a su equipo fueron realmente notables. Nos enseñó el valor de la perseverancia y el trabajo duro, empujándonos constantemente a ir más allá de lo que pensábamos que era posible. Su estilo de liderazgo fomentó un ambiente de trabajo colaborativo y empoderador», ha añadido.

En esa línea, el directivo español de STC ha considerado que las contribuciones de Alierta a la industria de las telecomunicaciones «no pueden ser exageradas» debido a que su capacidad para navegar por las complejidades de una industria en rápida evolución, para adaptarse a las tendencias emergentes y para aprovechar nuevas oportunidades colocó a la empresa en una «trayectoria de crecimiento sostenido».

Alierta falleció en el mediodía de este miércoles en Zaragoza a los 78 años aquejado de problemas respiratorios, si bien permanecía en un centro hospitalario de la capital aragonesa desde las pasadas navidades y en los últimos años había atravesado diversos problemas de salud.