IU critica que Sánchez esté dispuesto a «ceder al chantaje» de Marruecos y no aborde en Rabat la situación del Sáhara

Censura también las pretensiones de Rabat sobre delimitación de aguas y alerta sobre la situación de los Derechos Humanos en el país

Izquierda Unida (IU) ha tildado de «inaceptable» que España y Marruecos «no vayan a tratar la descolonización» del Sáhara Occidental, en referencia a la cuestión de la libre autodeterminación del pueblo saharaui, durante la Reunión de Alto Nivel (RAN).

A su vez, el área internacional de la formación ha criticado que con esta reunión, en la que participan «exclusivamente» los ministros socialistas, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «vuelve a demostrar que está dispuesto a ceder al chantaje de Marruecos».

En un comunicado, IU ha reprochado que los organizadores de esta cita internacional «ignoren», como puntos de la cumbre, cuestiones tan graves como la «aprobación unilateral por el Parlamento marroquí de una delimitación de aguas que no solo toma como propias» las que corresponderían a los sahararuis, sino que también «reclama otras pertenecientes a España dada su proximidad a las costas canarias, que incluyen zonas ricas en materias primas».

«Todo ello es producto de la falta de visión propia por parte del PSOE sobre las relaciones con el Magreb, lo que genera complicidad con la ocupación del Sáhara Occidental y con el autoritario régimen marroquí, mientras se ignora a otros actores regionales con los que, con esta postura, se renuncia a tener relaciones mutuamente beneficiosas», ha ahondado.

Por otro lado, ha recriminado también que en la Reunión de Alto Nivel entre los dos países queden «completamente fuera de la agenda la situación de los Derechos Humanos en Marruecos, que ahora mismo es crítica, como atestiguan los múltiples casos de periodistas y activistas sociales presos».

Finalmente, IU ha lamentado que Marruecos se haya convertido en el «guardián de las fronteras españolas y europeas y que utilice esta posición para obtener ingentes recursos económicos, sin que les importe a los máximos responsables del régimen la vulneración sistemática de los derechos de quienes tratan de llegar a Europa».