IU augura plataformas electorales por la España vaciada en C-LM y supedita a su programa la opción de sumarse a ellas
TOLEDO, 3
El responsable de Acción Institucional de Izquierda Unida en Castilla-La Mancha, Txema Fernández, ha asegurado que en el contexto actual y ante el «olvido» de las zonas rurales, podría propiciarse «que haya gente enfadada» que llegue a agruparse en torno a movimientos con ansias electorales para optar a tener representación política en el corto plazo. Ante esta circunstancia, no descarta poder sumarse siempre y cuando sus líneas maestras programáticas coincidan con las de la formación de izquierdas.
En una entrevista con Europa Press, Fernández ha abundado en que IU participará en estos movimientos «si los programas son posibles» y se ajustan a la doctrina de su formación.
Así, ha insistido en que estos movimiento «son legítimos», pero contarán con apoyo de IU «si no sólo hablan de España vaciada», ya que también «hay que hablar de eutanasia, de igualdad, de ley mordaza o de leyes económicas».
«Estos movimientos tienen que hablar de política, e IU estará en esos movimientos en base a programa, programa y programa. Si solo nacen para ocupar su espacio, son movimientos que serán demasiado partidistas. Si nacen para mejorar, sí estaremos», ha indicado.
En este sentido, ha recordad cómo IU ya ha protagonizado luchas y reivindicaciones en defensa del mundo rural, como el movimiento contra la minería de Tierras Raras o defendiendo la línea convencional de ferrocarril en la provincia de Cuenca.
Ahora, ha dicho que toca ver cómo fraguan esos movimientos, si bien asegura que no han existido hasta ahora conversaciones. «Pero sí estamos trabajando con estos movimientos», ha admitido, poniendo como ejemplo la posición conjunta frente a la instalación de macrogranjas.
Dentro de las reivindicaciones ya abanderadas en el pasado en defensa de los pueblos, ha reparado en la defensa por el ferrocarril convencional en Cuenca, recordando que el Gobierno de Castilla-La Mancha debería exigir al Estado «líneas férreas sostenibles y que garantices la cohesión territorial».
A su juicio, la alta velocidad no es garantía de progreso, como según su opinión ocurre en Puertollano, que cuenta con línea AVE «y tiene un paro estructural del 30%».
LA CONFLUENCIA CON PODEMOS «TIENE QUE SER ÚTIL»
En cuanto a la confluencia con Podemos en los distintos territorios, ha indicado que debería «servir y ser útil para la clase trabajadora», y si ese instrumento cambia o se amplía para recoger «a más sectores de la sociedad que no se ven representados», tiene que ser con la premisa de seguir manteniendo esa utilidad.
«Si no somos útiles no somos necesarios y de eso tenemos que aprender», ha aseverado Txema Fernández.
En este punto, ha hecho referencia al «movimiento incipiente» con Yolanda Díaz como cabeza visible, ante lo que ha opinado que «debe ir acompañada» por más sensibilidades, ya que si no, «no será necesaria».
«Trabamos para que cristalice en un movimiento útil a nuestra clase, a la que queremos representar. Ya se está viendo que cuando podemos gestionar, gestionamos de otra forma», ha abundado.
Al respecto de esta gestión, ha hecho referencia al papel de Alberto Garzón al frente del Ministerio de Consumo, una figura que ha sido víctima de «chascarrillos de cuñado de bar» pero que en todo caso ha conseguido colar en el debate extremos con la alimentación o los juguetes sexistas.
También ha arrogado al ministro de izquierdas el logro de colar en la Ley de Cadena Alimentaria el extremo de que no se pueda vender materia prima a menor precio del que se produce, algo ante lo que el PP, ha recordado, votó en contra.
«Desde hace 80 años no había ministros comunistas, y la visibilidad de Garzón está siendo importante, y eso duele a algunos que prefieren recurrir al chascarrillo pobre», ha indicado.
OPOSICIÓN EXTRAPARLAMENTARIA EN C-LM
En otro orden de cosas, Txema Fernández ha reivindicado la labor de oposición de IU en Castilla-La Mancha a pesar de no tener representación en el Parlamento autonómico.
De este modo, ha remarcado cómo han presentado hasta seis proposiciones no de ley en las Cortes además de las enmiendas presentadas a presupuestos y a otros proyectos legislativos, algo que IU «va a seguir haciendo».
Para la formación, mantener los servicios públicos seguirá siendo «el pilar fundamental» de su trabajo, todo con el objetivo de mantener «derechos y garantías laborales».
Todo ello en un contexto «histórico» ante la posibilidad de recibir fondos europeos y poder disponer de ellos «sin reglas de gasto».
SE RESIENTE LA AFILIACIÓN
A nivel interno, Fernández ha reconocido que la afiliación al partido se ha visto resentida por la pandemia, sobre todo por «bajas personales» achacadas al coronavirus.
«Pero somos una organización a la que nos gusta vernos en los órganos. Durante la pandemia hemos tenido complicado juntarnos a través de una pantalla. Lo hemos pasado mal, pero hay músculo político para seguir siendo una alternativa», ha aseverado.
Aunque IU está en la oposición, basa en el municipalismo su fuerza, con presencia en gobiernos locales y con trabajo intenso allí donde no gobiernan.
«Estar en la oposición significa ser reconocibles, y lo conseguimos en pequeños pueblos donde los concejales se mantienen en una línea política que nos identifica, pegados a la clase trabajadora», ha defendido.