Iturgaiz reprocha a Urkullu su «soberbia institucional» y su «pacto férreo» con Sánchez «contra el interés» de Euskadi

Critica que «preso de sus prisas» y ante el «desplome de su capital político» pretenda «enredar a los vascos» en su convención social

VITORIA, 14

El presidente del PP vasco, Carlos Iturgaiz, ha reprochado al Lehendakari, Iñigo Urkullu, su «soberbia institucional» y su «pacto férreo» con Pedro Sánchez «contra los intereses» de Euskadi. Además, ha criticado que «preso de sus prisas» y ante el «desplome de su capital político», pretenda «enredar a los vascos» en su «última ocurrencia», la convención social.

Durante su intervención en el pleno de Política General en el Parlamento Vasco, Iturgaiz ha dicho al Lehendakari que su proyecto político está «agotado». También le ha recordado que la actitud de los populares ha sido, «en todo momento, de mano tendida».

«Como también lo ha hecho Feijóo con Pedro Sánchez, porque se piensa en soluciones a los problemas reales tanto del conjunto de los españoles como de los vascos; una mano tendida que tanto usted, señor Urkullu, como el señor Sánchez se han apresurado a rechazar», ha apuntado.

A su juicio, resulta «evidente» que Iñigo Urkullu «siempre ha evitado estrechar esta mano» porque «dispone de una mayoría cómoda, al menos, mientras se teje la telaraña en la que miembros de su propio Gobierno esperan atraparle dentro de pocos meses», en referencia al PSE-EE.

Para el líder de los populares, Urkullu y el PNV «parecen perdidos en su laberinto, incapaces de romper una dinámica de pactos con la izquierda, que el tiempo ha acreditado contraria al interés general».

Carlos Iturgaiz ha asegurado que el Gobierno Vasco mantiene «un pacto férreo con Pedro Sánchez contra el interés de los vascos» y la «permanente tentación de hacer política y políticas con Bildu, radicalizando posiciones en temas clave, en los que un gobierno responsable debería primar el consenso».

Por ello, ha arremetido contra el «modo de gobernar» de Urkullu, que ha calificado de «soberbia institucional», y su «sentimiento de inmunidad o impunidad, que descarta la rendición de cuentas propia de la política en democracia».

En su opinión, la pandemia lo «puso de manifiesto», y se abrieron «enormes boquetes en Osakidetza o Lanbide» y la Ertzaintza, «con una situación difícil de creer». «Están sumiendo a la Ertzaintza en una grave crisis, de carácter ya estructural y, lo peor, no tienen propósito de enmienda», ha dicho.

Según Iturzgaiz, «a la lista hay que añadir a los empresarios; al mundo de los emprendedores en general» a los que «ha abroncado», o al comercio y los hosteleros. «Oskidetza en lucha, ertzainas en lucha, hostelería en lucha, radio pública en lucha y, por si faltaba algo, esta legislatura ha sido también la del final de la impunidad del PNV», ha manifestado en referencia al caso de Miguel .

PACTOS DE HIERRO

El presidente del PP vasco ha arremetido contra los «pactos de hierro con Pedro Sánchez» que «vienen de lejos». «Nos han salido muy caros a los vascos porque han sido pactos contra el interés de la sociedad vasca», ha censurado.

En este sentido, ha acusado al Gabinete Urkullu de ser «cómplice» de «leyes vergonzosas, con consecuencias tan graves como la del solo sí es sí » y, en materia penitenciaria, «de prestarse a ser instrumento de los pactos de Sánchez con Bildu». «El precio de la transferencia ha sido hacer el trabajo sucio con los etarras condenados por la Justicia, para que los socialistas se manchen menos las manos», ha censurado.

Para Iturgaiz, «ese aferrarse al Frankenstein, les ha llevado a «soportar todo y de todo», como «los incumplimientos de Sánchez». En este punto, ha citado la Y ferroviaria «paralizada» con el Gobierno del PSOE, y cuya llegada a las capitales «es una incógnita sin despejar». En esta línea, cree que el Lehendakari ha sido «más exigente con Macron y la conexión» del TAV con Dax.

También ha subrayado que Urkullu ha tenido que asistir a «la descarada preferencia» de Sánchez por los pactos con EH Bildu, partido al que «ha legitimado, potenciado y prestigiado; sin un titubeo, sin pensar en la permanente ofensa a las víctimas del terrorismo de ETA, nunca condenado por Sortu». «Lo del remero de Urdaibai se suma a una larga lista de agravios y ofensas», ha añadido.

TENTACIÓN CON BILDU

Por otra parte, ha reprochado al Lehendakari «la tentación de hacer políticas con Bildu y como Bildu» en «el juego de la doble mayoría: administrar el día a día con los socialistas, y jugar al desbordamiento constitucional y estatutario con Bildu».

En este punto, ha aludido al «nuevo estatus político vasco» que «saca del cajón de vez en cuando», que «quiebra los consensos del Estatuto, que no cabe en el marco constitucional y que reproduciría escenarios vividos con el Plan de Ibarretxe».

«Nuestro problema es que no somos una nación vasca. Ahí radican todos nuestros males, y usted, cual profeta, nos ha hecho llegar la ruta hacia la tierra prometida, que ahora es la convención constitucional», ha , ironizado.

Tras aludir al Plan Ibarretxe y las bases de nuevo estatus «pactadas en la ponencia de autogobierno por PNV y Bildu», ha asegurado que «ahora, preso de sus prisas y ante el desplome de su capital político y respaldo social», Urkullu «nos quiere enredar a todos los vascos con su última ocurrencia, la convención constitucional, con el indisimulado objetivo de pescar en caladeros» de la formación soberanista, «consciente de que, quien antes fuera pez grande en el mundo nacionalista, hoy no es más que carnaza para el pez chico».

«No nos sorprende, cada vez que llega un debate de política general usted nos regala una ocurrencia nueva. Lo vimos con el nuevo estatus, con la idea de la nación foral y, como no hay dos sin tres, ahora nos regala su idea de convención constitucional para dar satisfacción a los delirios políticos de los nacionalistas», ha señalado.

El líder de los populares vascos ha criticado también las políticas educativas de Euskadi y ha advertido de que «es una amenaza al futuro confiar el futuro de la educación a pactos con Bildu». «Hay miles y miles de alumnos que estudian en una lengua que comprenden insuficientemente; también miles, uno de cada cinco, que dominan mal tanto el castellano como el euskera», ha enumerado, para denunciar que se pretende «una escuela monolingüe euskaldun», como «puro fundamentalismo lingüístico».

CAMBIOS

Carlos Iturgaiz ha afirmado que, al igual que «es posible el cambio en el conjunto de España, es posible aquí, en las instituciones vascas». «No está escrito que el futuro deba ser la reedición del servilismo frente a las políticas de Sánchez o la inútil imitación de Bildu».

Iturgaiz se ha ofrecido a «contribuir a formar mayorías alternativas» porque «es posible romper esos viejos corsés, que reducen la política vasca a una especie de día de la marmota». «Solo necesita, lehendakari, superar temores», ha dicho.

Asimismo, ha advertido a Urkullu que se presenta en septiembre «con una incertidumbre política mayor que nunca, con nula autocrítica, y sin desterrar su persistente mala gestión que mantiene sin resolver los problemas».

También le ha censurado que, durante la pandemia y «todo lo que llevamos de legislatura», su Gobierno «no ha hecho nada para aliviar el gran esfuerzo fiscal que hacen los ciudadanos» y haya sido «corresponsable» de la «caótica y oscura» gestión de los Fondos Europeos.

El líder del PP vasco ha apuntado que, frente a quienes pretenden que las Diputaciones Forales «batan récord de recaudación», debe «anticiparse a la crisis y rebajar impuestos». «Tenemos margen para hacerlo, sin afectar a los presupuestos», ha señalado.