Intersindical, decepcionada con la reforma laboral porque «no recupera los derechos perdidos en 2010 y 2012»
VALÈNCIA, 25
Intersindical Valenciana considera que el pacto del Gobierno y los agentes sociales para la reforma laboral es una nueva decepción para la clase trabajadora porque «no recupera los derechos perdidos en 2010 y 2012», con los gobiernos de Zapatero y Rajoy.
A falta de estudiar con detalle el texto que aprobará el Consejo de Ministros, el sindicato advierte que el borrador indica claramente que «no se modifica la parte más lesiva y agresiva de la reforma del PP, que facilitó abaratar el despido reduciéndolo a la mitad (de 42 a 24 meses) y recortando de 45 a 33 días en caso de que fuera improcedente».
Tampoco recupera, a su juicio, la estructura de la negociación colectiva previa que «el PP dinamitó». «De hecho, consolida que los convenios de empresa puedan tener peores condiciones que los sectoriales, excepto en salarios», denuncia en un comunicado.
Otro de los aspectos que rechaza Intersindical es que «la patronal ha aplaudido que se priorizarán los convenios estatales frente los autonómicos y provinciales», algo que teme que pueda suponer impedir mejoras en las autonomías donde los sindicatos firmantes (UGT y CCOO) no son los mayoritarios.
Además, critica que la nueva reforma «amplía y facilita» que a empresa pueda aplicar un ERTE o modificar los condiciones de trabajo o jornada, así como que «aspectos que se publicitan como nuevos en cuanto a la temporalidad y subcontratación no son fruto de ningún acuerdo, sino de la necesaria aplicación de las sentencias judiciales que se están ganando en la materia».
Paralelamente, alerta que los nuevos contratos formativos «perpetúan la precariedad de la gente joven» y ponen de relieve que la nueva ley de Formación Profesional era una herramienta para «facilitar la explotación laboral». Y todo ello, lamenta, «sin poner encima de la mesa la reducción de jornada a 32 horas o cuatro días que contribuiría a reducir las brechas de género».
En definitiva, para la central sindical, este acuerdo se difunde como histórico cuando «los titulares se centran en las pocas mejoras que incluye respecto a la reforma de 2012». Asegura así no entender que, 11 años después de la reforma de 2010 y con una situación política diferente, haya «un Estatuto de los Trabajadoras y Trabajadores mucho peor que entonces».
«EL PACTO POR EL PACTO»
Tras recordar que el Gobierno de coalición (PSOE-Unidas Podemos) realizó la promesa electoral de derogar la reforma laboral, achaca su decepción a la «sobrevaloración» del hecho de pactar con la patronal o del concepto de concertación «por encima de todo, del pacto por el pacto». «Parece que algunas personas y organizaciones olvidan que, cuando gobierna la derecha, solo consensúa con la patronal y la banca, deroga derechos y legisla por los clases dominantes, sin la más mínima contemplación», abunda.
Por contra, en su opinión, el ejecutivo de Pedro Sánchez debería haber priorizado la recuperación de derechos laborales y «no el pacto con quien no comparte ni los planteamientos más esenciales». «La clase trabajadora necesita que es derogan los reformas de 2010 y 2012; necesita trabajo estable, no precario, con remuneración suficiente para poder vivir con dignidad; necesita condiciones laborales que fomentan la coresponsabilidad, necesita poder cotizar para reunir a la jubilación –reivindica–. De momento, continuamos esperando».