Interior identifica medio centenar de bulos que circulan en redes sociales
El Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) ha identificado cerca de medio centenar de bulos que circulan en redes sociales difundiendo información falsa, en la mayoría de los casos, o imprecisa, según figura en un informe del Ministerio del Interior al que ha tenido acceso Europa Press.
El documento recopila desde audios compartidos a través de redes sociales como WhatsApp hasta informaciones falsas manipuladas para que parezcan noticias publicadas por medios de comunicación fiables, como los bulos de que la exalcaldesa de Madrid Manuela Carmena y el rey emérito Juan Carlos se habían contagiado de coronavirus y que fueron difundidos por una cuenta falsa en Twitter que se hace pasar por el diario El País .
El CITCO ha comprobado que un audio que circula en redes sociales de una mujer que se identifica como la médico de familia Natalia Prego Cancela y que alerta de una «manipulación emocional y psicológica de la población» es falso, así como otro atribuido al supuesto jefe de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón de Madrid.
La mayoría de los bulos identificados son mensajes difundidos a través de diferentes redes sociales y que toman la forma de avisos o recomendaciones que proceden de una fuente sin identificar o presentado de manera muy general, como de gente que vive en Milán (Italia) que recomienda usar sólo un par de zapatos para salir a la calle y dejarlo en la puerta de casa al llegar.
El informe elaborado por el CITCO desmiente también mensajes que afectan a supuestas políticas de empresa, como aquel que avisa de que Mercadona limitará la compra a un máximo de dos artículos por persona o el que pretende demostrar que antes de los primeros casos detectados en China un ambientado de la marca Glade ya hablaba del coronavirus, cuando en realidad la etiqueta se refería a otro coronavirus, no al que causa COVID_19.
FALSAS DECLARACIONES
Otro grupo de bulos afectan a personalidades públicas a quienes se atribuyen declaraciones que nunca han efectuado y que se difunden desde cuentas falsas en redes sociales, como la que aparenta ser el expresidente del Gobierno Felipe González diciendo que «el experimento de la coalición (en referencia al actual Gobierno) ha caducado ya». También el diputado de Vox Javier Ortega Smith ha sido víctima de estos bulos al atribuirle la siguiente cita falsa: «Prefiero tener coronavirus que homosexualismo».
Falso es también que los miembros del Gobierno y dirigentes de Podemos Pablo Iglesias e Irene Montero tengan a la puerta de su casa dos UVI móviles para atenderles (ella dio positivo en las pruebas del coronavirus), que el ministro egipcio de Salud haya presentado a China un suero egipcio que cura la enfermedad o que el Vaticano haya confirmado que el Papa Francisco ha resultado contagiado.
Otros bulos han tomado la forma de supuestos documentos oficiales, como uno atribuido al Ministerio de Sanidad con fecha del 14 de marzo con las supuestas multas por saltarse la cuarentena; una falsa orden de la Policía Nacional dirigida a los ciudadanos madrileños para que permanezcan en sus casas o de lo contrario serían multados con 1.000 euros o los supuestos avisos por el que el Gobierno de España informaba de que un helicóptero pulverizaría todos los municipios de la provincia de Málaga o señalaba que daría por aprobados todos los exámenes que no se hayan podido hacer por el cierre de los centros educativos.
El CITCO ha comprobado también que algunos vídeos que muestran saqueos o aglomeraciones en supermercados pertenecen a otros momentos ocurridos en otros países, no aquí en España como consecuencia de esta crisis. El informe de este organismo dependiente de Interior también ha detectado otra serie de mensajes falsos con supuestas recomendaciones médicas ante la enfermedad, como aquellos que afirman que «beber agua caliente mata el bicho» o que hacer gárgaras con agua tibia y sal o vinagre prevenga la infección.
Ante esta cascada de mentiras y desinformaciones, desde la Policía recomiendan encarecidamente a la población que se informe a través de fuentes oficiales y no haga caso de supuestos avisos del Gobierno o las fuerzas de seguridad si no se han emitido a través de sus canales oficiales.