Hacienda pide al Congreso cubrir su baja en la Comisión de Transparencia, que se suma a los relevos pendientes en la JEC
El organismo electoral debería haberse renovado en noviembre y el adelanto en Galicia le ha pillado en funciones
El Ministerio de Hacienda ha pedido al Congreso que nombre a su representante en la Comisión de Transparencia y Buen Gobierno, un puesto que quedó vacante el pasado mes de agosto y que se unirá al relevo pendiente de los cinco miembros de la Junta Electoral Central (JEC) que el Congreso debería haber designado el pasado mes de noviembre.
El Congreso se quedó sin representante en ese órgano de Transparencia porque su vocal, el diputado socialista Valentín García Gómez, cesó como diputado el pasado mes de agosto, al no haber renovado su acta en las elecciones del 23 de julio.
Ahora, según han informado a Europa Press fuentes parlamentarias, el Ministerio de Hacienda se ha dirigido a la Cámara Baja instándole a iniciar el procedimiento para la designación del vocal que le corresponde.
La Comisión de Transparencia y Buen Gobierno tiene entre sus funciones asesorar en materia de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno, hacer informes sobre las leyes relativas a estas material, aprobar una memoria anual sobre el grado de aplicación de Ley de Transparencia, proponer recomendaciones, directrices o guías de buenas prácticas e impulsar la cooperación con órganos similares a nivel autonómico o internacional
Este órgano lo preside quien ocupa la Presidencia del Consejo (ahora José Luis Rodríguez Álvarez) y siete vocales nombrados por el Gobierno a propuesta del Congreso, el Senado, el Tribunal de Cuentas, el Defensor del Pueblo, la Agencia Española de Protección de Datos, la Secretaría de Estado de Función Pública y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). Ninguno de ellos recibe remuneración por esta responsabilidad.
SIEMPRE TARDE
Todos ellos tienen un mandato de cinco años prorrogable por otros cinco. Las vacantes que se produzcan antes de esos cinco años, según establece la norma que rige su funcionamiento, deben ser cubiertas dentro del siguiente año desde la fecha de la misma y hasta completar el mandato de un lustro.
Valentín García Gómez fue elegido para el cargo en marzo del año pasado, dos meses después de que su antecesor el también socialista Odón Elorza dejara su acta de diputado por discrepancias con la dirección del partido.
Pero esa celeridad en el relevo no ha sido la tónica habitual. Antes del desembarco de Elorza –que fue elegido a la par que la todavía representante del Senado, la popular Teresa Ruiz Sillero– los puestos reservados para ambas Cámaras estuvieron vacíos casi dos años.
En ese periodo se celebraron dos elecciones generales y los grupos fueron incapaces de ponerse de acuerdo para estos nombramientos. Las Cortes también tardaron meses en acordar la propuesta de nuevos vocales tras la repetición electoral de 2015.
EL CGPJ SÍ HA CUMPLIDO
El Congreso también va ahora tarde en la renovación de la JEC, cuyos nuevos vocales deberían haber sido elegidos en los 90 días posteriores a la constitución de la Cámara surgida de las elecciones de julio. Ese plazo arrancó el pasado mes de agosto y ya se ha superado ampliamente sin que la Mesa del Congreso haya recibido ninguna propuesta de los partidos con representación parlamentaria.
El órgano superior de la Administración Electoral con sede en el Congreso, está compuesto por ocho magistrados del Tribunal Supremo designados por sorteo y cinco catedráticos en activo de Derecho o de Ciencias Políticas y Sociología designados por el Congreso a propuesta conjunta de los partidos. También asiste, con voz pero sin voto, el director de la Oficina del Censo Electoral y ejerce como secretario de la JEC el secretario general del Congreso.
Es el único órgano electoral que tiene carácter permanente, ya que las juntas de zona, provinciales y autonómicas se crean expresamente para cada proceso electoral, pero sus integrantes no son cargos vitalicios, sino que han de ser renovados en cada legislatura.
Quien sí ha hecho sus deberes ha sido el Poder Judicial, ya que elConsejo General (CGPJ) comunicó a principios de noviembre los nombres de los ocho magistrados del Supremo que se integrarán en la nueva JEC, elegidos por insaculación. De entre ellos saldrán las personas que ocupen la Presidencia y Vicepresidencia de la Junta esta legislatura.
CINCO CATEDRÁTICOS
Los que faltan son los cinco catedráticos que debe nombrar la mesa del Congreso a propuesta de los partidos, un reparto que suele atender al peso de los distintos grupos parlamentarios. Los actuales fueron propuestos por el PSOE (dos vocales), el PP, Vox y Unidas Podemos, con uno cada uno). Tras las elecciones del 23 de julio, lo previsible es que ahora sea el PP quien proponga dos nombres y el PSOE sólo uno.
Cuando el Congreso apruebe su propuesta, los cinco catedráticos deberán pasar examen ante la Comisión Consultiva de Nombramientos para que la Cámara dé su plácet, un trámite del que se libran los ocho vocales de carrera judicial.
Mientras esa renovación no se produzca, la actual Junta Electoral Central que preside el magistrado Miguel Colmenero seguirá ejerciendo sus funciones y supervisando los procesos electorales en curso. En el caso de las elecciones gallegas, el grueso de las labores de administración electoral lo realizarán las juntas provinciales y autonómicas, pero la JEC debe estar preparada para los recursos que puedan llegar a Madrid.