Guardiola y Page impulsarán la coordinación de Centros 112 y la prevención y extinción de incendios en zonas limítrofres
MÉRIDA, 10
Los presidentes de Extremadura y de Castilla-La Mancha, María Guardiola y Emiliano García-Page, respectivamente, han rubricado este lunes en Mérida un protocolo mediante el cual ambas comunidades impulsarán la coordinación de sus Centros 112 en materia de emergencias y de prevención y extinción de incendios en zonas limítrofes.
En concreto, el protocolo establece los procedimientos de trabajo común para situaciones de emergencias que afecten e impliquen a las dos comunidades autónomas, y derivará posteriormente en otros procedimientos sectoriales con sus correspondientes grupos de trabajo y seguimientos para «coordinar» los centros 112 y para «reforzar» la prevención y extinción de incendios forestales en zonas limítrofes.
De este modo lo ha explicado la presidenta de la Junta de Extremadura en rueda de prensa conjunta con García-Page tras rubricar ambos mandatarios el protocolo, y al hilo de lo cual Guardiola ha remarcado la «absoluta prioridad» de que los recursos estén «dispuestos» y «sincronizados» para atender de manera «inmediata» aquellas emergencias que se produzcan en zonas limítrofes de ambas regiones.
Ello, según ha ahondado María Guardiola, con el ánimo de desempeñar las competencias con «eficiencia» y de «prestar más y mejores servicios públicos» en municipios que, además, cada día hacen frente al «reto demográfico», para cuidar de ese modo «la España rural» que con «tanto orgullo» representan Extremadura y Castilla-La Mancha, dos regiones que comparten 400 kilómetros de frontera en los que en situaciones de emergencia «la rapidez es crucial».
EXTREMADURA Y C-LM «DE LA MANO»
Tras afirmar que «a menudo se producen incidencias en zonas limítrofes en las que los recursos de la comunidad vecina están mucho más cerca que los recursos de la propia comunidad donde se ha producido esa incidencia», la presidenta extremeña ha reconocido que en esta temática «hay un margen de mejora» en el que, según ha subrayado, los gobiernos de Extremadura y C-LM van a «trabajar de la mano».
«Hay que tener en cuenta que cualquier llamada de alerta puede entrar indistintamente en el centro 112 de una comunidad autónoma aunque la emergencia se haya producido en la región limítrofe», ha señalado Guardiola, quien ha argumentado por ello es «muy necesario» que los centros 112 de ambas comunidades tengan geolocalizados los recursos más cercanos, para de ese modo atender la gestión de la emergencia de una manera «eficaz» y que el tiempo de respuesta sea «lo más corto posible», porque –ha añadido– «cada segundo cuenta».
En este punto, ha recordado que sucesos como la DANA que sufrió Valencia y algunos municipios de Castilla-La Mancha evidencian la necesidad de la coordinación. «Cuanto más coordinados estemos y cuanto más rápidos y más ágilmente actuemos, podremos salvar vidas, si desgraciadamente, volviera a surgir una situación terrible como ésta», ha espetado la presidenta extremeña.
Por su parte, en materia de prevención y extinción de incendios, María Guardiola ha explicado que el documento firmado entre los ejecutivos de Extremadura y Castilla-La Mancha «sienta las bases» para que los órganos competentes en dicha temática no tengan que hacer una solicitud previa de ayuda a la comunidad autónoma vecina en el caso de que haya un fuego en las zonas de actuación conjunta.
Como ejemplo, ha apuntado que «a la llegada a un incendio, el recurso que llega allí, lo primero que tiene que hacer es mandar la ubicación exacta de cuál es la dimensión o la magnitud de la emergencia, y lo pondrá en conocimiento la central de control, la central de coordinación, que compartirá esa información».
PREDISPOSICIÓN AL DIÁLOGO
Cabe apuntar, asimismo, que María Guardiola ha agradecido a Emiliano García-Page su «predisposición al diálogo» y el «acercamiento» entre instituciones, algo a su juicio «cada vez más necesario»; y ha incidido en que la «política útil, sin colores, sin excusas» es la que debiera prevalecer en favor del «interés» de los ciudadanos, «por encima de las siglas y más allá de las distintos enfoques políticos».
«Esto es servicio público con la mirada puesta en el bienestar de los ciudadanos de ambas comunidades autónomas. Y esto debe ser lo normal y esto debe ser lo habitual», ha espetado la presidenta de la Junta sobre el I Encuentro de Colaboración Institucional entre la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha y la Comunidad Autónoma de Extremadura celebrado este lunes en Mérida.
Se ha mostrado en este punto «convencida» de que desde el Gobierno que preside Emiliano García-Page, al igual que desde el Ejecutivo extremeño, van a mantener «la mano tendida» y la disposición para «trabajar en lo que sea necesario para mejorar la vida de los vecinos».
GARCÍA PAGE VE «DE SENTIDO COMÚN» ENTENDERSE
Por su parte, sobre el acuerdo al respecto del Servicio de Emergencias, García-Page ha considerado que es «de sentido común» el poder coordinarse entre comunidades en este tipo de sucesos, y es que las urgencias «no entienden de fronteras, entienden de soluciones para las personas».
Tal y como ha defendido, en una «unidad soberana como es España», estos acuerdos son «de sentido común», y ha considerado que suponen «un ejercicio en sustitución de lo que debiera haber sido una dinámica normal en España en los últimos 30 años».
Así, ha remarcado que cuando se descentralizaron los servicios públicos esenciales «a la postre se incurrió en defectos», como la diferencia de soporte tecnológico en los distintos sistemas de salud regionales por todo el territorio español.
«Echo en falta desde hace mucho tiempo que en Estado haya un planteamiento proactivo de estrategia de armonización y limar cuestiones contradictorias. Las autonomías nos copiamos entre nosotras en lo bueno, nos complementamos y nos ayudamos muchísimo más de lo que se ayudan en el Congreso», ha señalado.
Y es que para el dirigente autonómico, la buena sintonía entre presidentes autonómicos difiere del clima político de Madrid, ante lo que ha vuelto a pedir «sentido común» en otros frentes como «poder unificar procedimientos de colaboración administrativa».
Así, García-Page ha incidido en que con este tipo de acuerdos, Extremadura y Castilla-La Mancha están siendo «leales al espíritu» de la Constitución. «Esto no es una opción o una oportunidad que ejercemos, es una obligación que hacemos a mil amores», ha afirmado.
Al mismo tiempo, ha añadido que estos acuerdos «son también un ejercicio de solidaridad». Y es que «ahora que está de moda» el concepto, ha querido llamar la atención sobre el concepto de una palabra «hermosísima, preciosa».
Así, en materia de financiación, ha señalado que «no es solidaridad, sino redistribución justa de la riqueza». «Uno puede ser solidario con un helicóptero sanitario, uno puede prestar una motobomba en un incendio, eso es ser solidario. Sólo se puede ser solidario con lo que es de uno. Pero cuando hablamos de riqueza, la de Extremadura no es de Extremadura, la de Castilla-La Mancha no es de Castilla-La Mancha, pero la de País Vasco no es de País Vasco y la de Cataluña no es de Cataluña», ha reflexionado.
Por ello, ha rechazado el «cuento, con todas las letras y de los más feos y humillantes» de que una autonomía deja fondos por solidaridad al fondo común. «Yo defiendo, lo defiende todo el mundo, que el que más tiene, más paga. Y si eso vale para la declaración de la renta, vale para las relaciones entre los territorios», ha abundado.