Gobierno y sindicatos firman el primer Plan de Igualdad para el personal de la Administración cántabra
Incluye un Protocolo de Prevención y Actuación ante situaciones de acoso en el trabajo
El Gobierno de Cantabria y los sindicatos han suscrito este miércoles el acuerdo que refrenda el primer Plan de Igualdad entre mujeres y hombres al servicio de la Administración General de la Comunidad Autónoma y el Protocolo de Prevención y Actuación ante el Acoso en el Trabajo.
El documento es el resultado del acuerdo alcanzado en la Comisión para la Negociación del Plan de Igualdad, con la aprobación de los sindicatos UGT, CCOO, SIEP, CSIF y SUC, que lo han firmado junto a la consejera de Presidencia, Isabel Urrutia.
Urrutia ha destacado que se trata de un «documento de todos, resultado del consenso, que contribuirá a la igualdad efectiva entre mujeres y hombres en el seno de la Administración de la Comunidad Autónoma».
Asimismo, «el Plan refuerza el compromiso del Gobierno y contribuye a la responsabilidad de la Administración en su condición de empleadora, participando también en la defensa y protección de las víctimas de violencia de género», ha añadido.
El Plan de Igualdad se configura como un documento estratégico en la esfera del empleo público, que busca la igualdad plena de oportunidades mediante la detección y eliminación de toda forma de discriminación entre mujeres y hombres que suponga un obstáculo para el pleno desarrollo de sus carreras profesionales.
Además, incorpora un Protocolo de Prevención y Actuación ante el Acoso en el trabajo, «esencial para la defensa del derecho de todas las empleadas y empleados públicos a ser tratados con dignidad».
La consejera ha agradecido a todos los presentes en la firma «el tesón del diálogo, de la palabra en la negociación y del compromiso en el acuerdo». Como ha recordado, a lo largo de un año –desde la reunión conjunta de la Mesa Sectorial de Función Pública y el Comité de Empresa que tuvo este Plan como único punto en el orden del día– han mantenido 11 reuniones «con aportaciones, trabajo, acuerdos», que se han visto reflejados en este documento.
Así, todos los representantes sindicales presentes en el desarrollo de este primer Plan de Igualdad han rubricado el documento, y han agradecido el trabajo tanto de la Consejería como de la Dirección General de Función Pública.
Desde UGT, su representante, Julián Díaz, ha señalado que se trata de «un marco que claramente va a ser beneficioso para las trabajadoras y trabajadores de este Gobierno». «Al final el marco de conciliación es muy importante, la promoción profesional de las mujeres es vital y tenemos que apostar por un marco de igualdad efectivo, claro, que haga que tanto hombres como mujeres trabajen en las mismas condiciones», ha añadido.
Por parte de CCOO, Reyes Baquero ha mostrado satisfacción con el trabajo realizado y la incorporación de «numerosas aportaciones» del sindicato al Plan, a la espera de la constitución de la comisión de seguimiento en la que, ha advertido, «seremos beligerantes y promoveremos un estricto cumplimiento del mismo».
Mientras, para CSIF «es un Plan muy amplio en el que falta mucha concreción», algo que pretende subsanar en esa comisión de seguimiento, en la que pretende «concretarlo más y ver la evolución». «Estamos ilusionados porque es el inicio, pero expectantes a que se concrete y que esos objetivos se cumplan», ha dicho Xabier Rodríguez.
Desde SIEP, Esther Felices ha añadido que «ahora empieza lo realmente importante con la implantación de las medidas, que podamos alcanzar los objetivos que hemos previsto y que cuando llegue la evaluación final del plan nos podamos felicitar de que hemos conseguido lo que nos proponíamos».
En la misma línea se ha manifestado Sergio García, de SUC. «Estamos muy contentos de estar un paso más cerca de la igualdad efectiva entre mujeres y hombres», ha ensalzado.
Por último, Rebeca Marqué, miembro de la Comisión, ha señalado que este plan va a «dignificar» la labor de los trabajadores de la Administración, que «será más fuerte y cohesionada socialmente e implicada en la lucha de la igualdad de las trabajadoras y trabajadores».
Todos ellos han coincidido en la importancia de la aprobación de un protocolo de acoso que era «ampliamente esperado», ya que «desafortunadamente hay situaciones de acoso en todos los ámbitos, el Gobierno no es ajeno a ello». Con este documento se cuenta ya un marco en el que las trabajadoras van a poder «tener una línea y un protocolo de actuación en estos casos, siempre con la tolerancia cero», han celebrado.
PLAN DE IGUALDAD
El Plan de Igualdad, que es de aplicación al personal funcionario y laboral al servicio de la Administración General, sus organismos y entidades de derecho público vinculados o dependientes de ella, busca dar cumplimiento a lo dispuesto en la Ley 2/2019, de 7 de marzo, de igualdad efectiva entre hombres y mujeres.
Para su elaboración se han abordado dos ámbitos de trabajo, siendo el primero de ellos un análisis de la normativa vigente en el que se han identificado los puntos a desarrollar. Y, por otro lado, se ha realizado un «profundo» diagnóstico de la situación de partida con datos segregados por sexo en distintos ámbitos de la función pública, así como la concreción de los objetivos y acciones a desarrollar, junto con criterios y mecanismos de seguimiento y evaluación.
El diagnóstico de la situación refleja que la plantilla está ampliamente feminizada, alcanzando las mujeres el 61,87% frente al 38,13% de hombres. La feminización es superior en el ámbito de personal funcionario, en donde alcanza un 66,03%, que en el ámbito de personal laboral, donde es del 56,86%.
En cuanto al grupo de edad, en personal funcionario las diferencias son más acusadas en el tramo de 30 a 49 años, donde el porcentaje de mujeres asciende a un 72,30%, mientras que en el caso del personal laboral esa mayor diferencia se observa en el grupo de de 18 a 29, en el que las mujeres alcanzan el 62,79%.
Los objetivos generales que se establecen en el Plan de Igualdad se han concretado en 11 ejes específicos que abordan temáticas como el acceso al empleo público, la carrera profesional, la formación, la conciliación, el acoso sexual y por razón de sexo y la prevención de riesgos laborales y salud laboral.
Asimismo, tiene en cuenta la estructura organizativa de la Administración, las retribuciones, la acción social, la mejora de la cultura administrativa en perspectiva de géneros y la violencia de género. El Plan se completa con la descripción de 87 medidas concretas con las que se desarrollarán cada uno de los objetivos descritos.