Gobierno y Podemos se conjuran para cambiar la LOREG para imponer un mailing único y listas cremallera
También se comprometen a quitar trabas al voto rogado y buscar consensos para mejorar la proporcionalidad del sistema»
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el secretario general del Podemos, Pablo Iglesias, han plasmado en su acuerdo presupuestario para 2019 su compromiso de impulsar una reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG) para imponer un mailing único y listas cremallera , es decir, candidaturas en las que haya que alternar a mujeres y hombres.
«Se acuerda realizar un mailing electoral único», reza el documento suscrito por ambos este jueves en el Palacio de la Moncloa. Tras las elecciones generales de diciembre de 2015, los partidos ya analizaron la conveniencia de poner fin al envío postal de propaganda electoral por separado, pero finalmente no hubo acuerdo y en las legislativas de 2016 todos los electores volvieron a recibir un sobre de cada formación.
Los defensores del mailing único, principalmente Ciudadanos y Podemos, lo plantearon como una medida para ahorrar, pero chocaron principalmente con la oposición de PP y PNV, reacios a renunciar a una herramienta subvencionada que permite a los partido enviar directamente las papeletas de votación a los electores en todos los rincones de España.
MÁS IGUALDAD EN LAS INSTITUCIONES
El PSOE sí era más proclive a aceptar el fin el mailing y finalmente se ha comprometido a ello con el grupo confederal. En las recomendaciones para reformar el régimen y la financiación de los partidos políticos que pactaron en el Congreso PSOE, Unidos Podemos y Ciudadanos se abogaba por «abordar la regulación de un mailing electoral que evite los gastos innecesarios y garantice un auténtico pluralismo e igualdad entre los partidos políticos concurrentes a las elecciones , pero no se hablaba de su supresión total.
El acuerdo de socialistas y morados se ha sellado un día después de que la Comisión de Justicia del Congreso aprobase una reforma de la LOREG, incluida en la nueva Ley de Protección de Datos, que permitirá que los electores que lo deseen pidan al Censo que no pase su datos personales a los partidos para poder así evitar el mailing . Esta reforma se aprobará en Pleno la próxima semana y está previsto que ya esté en vigor para las citas electorales de 2019.
El texto pactado también prevé el establecimiento de listas cremallera , un sistema que ya se aplican internamente tanto el PSOE como Unidos Podemos y que supera la previsión legal establecida en la Ley de Igualdad de 2007, cuando se apostó por la democracia paritaria.
Según norma vigente, ningún sexo puede copar más del 60% ni tener menos del 40% de candidatos en tramos de cinco, es decir, puede haber tres hombres y dos mujeres o viceversa sin importar el orden en el que figuren en la papeleta. Las listas cremallera , por contra, obliga a alternar a los dos sexos, lo que garantiza que la representación de ambos en las instituciones sea más equilibrada.
VOTO ROGADO
Según el acuerdo de Sánchez e Iglesias, la modificación de la normativa electoral debería acabar también «con las trabas del voto rogado» que se introdujo en 2011 para los inscritos en el Centro Electoral de Residentes Ausentes (CERA) y que ha provocado importantes problemas y el descenso del voto de los emigrantes.
La búsqueda de una alternativa al voto rogado es, de hecho, el único acuerdo que se ha fraguado en la subcomisión para reforma de la LOREG que funciona desde el inicio de la legislatura en el Congreso, aunque todavía no se ha concretado cómo se va sustituir el sistema actual.
Asimismo, el texto incluye el compromiso de los dos firmantes de trabajar «para conseguir un amplio consenso que permita modificar la fórmula electoral para mejorar la proporcionalidad del sistema» electora, pero no da ninguna pista de cómo prevén hacerlo.