Gobierno vasco destaca que el fin de ETA ha sido «definitivo» pero ahora queda «reconocer el daño causado»
BILBAO, 4
El portavoz y consejero de Cultura y Política Lingüística del Gobierno Vasco, Bingen Zupiria, ha destacado que, pasados cinco años del anuncio de la disolución de ETA, la decisión ha sido «firme y definitiva», aunque ha considerado que ahora queda «analizar judicialmente todos los abusos y las vulneraciones de derechos humanos ocurridos, y reconocer el daño causado».
En una entrevista concedida a ETB1, recogida por Europa Press, Zupiria ha señalado que en Euskadi se ha vivido «un proceso inusual» en el final de ETA, ya que, según ha dicho, «decidió por su cuenta, por sí mismo, unilateralmente y sin ninguna negociación, acabar con la violencia», algo que, en su opinión, «ha sucedido en pocos lugares».
«Pasados unos años, y no como en otros lugares, esa decisión ha sido firme y definitiva. Eso significa que ha habido un compromiso político por parte de ese mundo que representa la izquierda abertzale para terminar con la violencia, y también que han controlado muy bien ese proceso, porque apenas ha habido disidencia y no hemos tenido imprevistos. Creo que, visto el poco tiempo que ha pasado, en qué momento estamos y cómo se ha tranquilizado nuestra sociedad, los pasos que hemos dado han sido rápidos y se han hecho bien», ha destacado.
A pesar de ello, el portavoz del Gobierno Vasco ha considerado que, a partir de ahora, por un lado, queda por «analizar judicialmente todos los abusos y las vulneraciones de derechos humanos ocurridos, y reconocer el daño causado, porque en nuestra sociedad hay muchas personas que han sufrido por el terrorismo y la violencia injusta».
En este sentido, ha señalado que es una de las decisiones que se pueden adoptar para reparar el dolor causado, es «decir que el tiempo cure ese dolor», aunque ha advertido de que «ya tenemos algunos casos anteriores y hemos visto cuanto cuesta curar ese dolor», en referencia a la Guerra Civil y los años de dictadura.
«Otra opción sería que los que estamos vivos asumiéramos esa responsabilidad y dijéramos que todo eso que sucedió no debió ocurrir y que fue injusto, y dar el paso de vivir uno al lado del otro a convivir. Es nuestra decisión», ha concluido.