Gobierno llama a acabar con la «situación de vacío» sobre seguridad de buques y pesca ilegal: «No hay excusa»

El ministro de Fomento en funciones dice que «hoy debemos finalizar un viaje que dura demasiado tiempo»

TORREMOLINOS (MÁLAGA), 21

El ministro de Fomento en funciones, José Luis Ábalos, ha hecho un llamamiento a todos los estados miembros e interesados para rubricar la Declaración de Torremolinos (Málaga) sobre el acuerdo de Ciudad del Cabo de 2012 en relación con la seguridad de los buques pesqueros, ya que, a su juicio, «no hay excusa para que mantengamos esta situación vacío».

«Hoy debemos finalizar un viaje que dura demasiado tiempo; no hay tripulación que sea capaz de resistir un periodo de embarque que supera ya los 40 años, ni tan siquiera los valientes marinos que hace 500 años participaron en la expedición comandada por Magallanes y Elcano, que supuso la materialización de la primera vuelta al mundo», ha afirmado, añadiendo que «ni siquiera ellos hubieran soportado esta interminable travesía que comenzó en Torremolinos el 7 de marzo de 1977», ha sostenido, albergando «esperanzas» para que hoy el viaje «pueda llegar a su fin».

Ábalos, que ha inaugurado en el municipio malagueño de Torremolinos, la Conferencia Ministerial sobre seguridad de los buques pesqueros y la pesca ilegal organizado por la Organización Marítima Internacional (OMI), ha llamado a la firma de la declaración política no vinculante jurídicamente con el objetivo de hacer pública la determinación de sus gobiernos de ratificar el acuerdo, en la fecha del décimo aniversario de su adopción, el 11 de octubre de 2022.

«Afrontamos hoy una nueva oportunidad para impulsar definitivamente la entrada en vigor del acuerdo de Ciudad del Cabo de 2012 y para combatir la proliferación de la pesca ilegal, no declarada y no reglamentaria», ha agregado, señalando que España siempre ha sido partidaria de abordarlo «con un enfoque conjunto entre los organismos internacionales de Naciones Unidas y el resto de las partes interesadas» y valorando el formato elegido en esta conferencia como «una excelente oportunidad para avanzar en los objetivos».

Para el ministro en funciones, «todos los estados miembros de la OMI estamos llamados a adoptar medidas que favorezca el cumplimiento de los criterios para la entrada en vigor del acuerdo de Ciudad del Cabo», ha agregado, precisado que la eficacia de dicho instrumento depende del apoyo de todos los estados miembros «con independencia del papel que cada uno juegue en materia pesquera».

Durante su intervención ha recordado, además, que la localidad de Torremolinos ha sido testigo en dos ocasiones de los intentos de la comunidad internacional por dotar al sector de la pesca de un marco jurídico internacional en materia de seguridad de los buques pesqueros de eslora igual o superior a 24 metros que operan en el mar.

En concreto, ha aludido a la Conferencia Internacional de Torremolinos de 1977 y a la que adoptó el protocolo de 1993. De igual modo, ha continuado, «a tales esfuerzos se suma el realizado con ocasión de la Conferencia Diplomática celebrada en Ciudad del Cabo en 2012 en la que se adoptó el acuerdo de Ciudad del Cabo por el que se actualizaba de manera efectiva el protocolo de Torremolinos».

Ha incidido en que 42 años después de la adopción del primer tratado internacional para abordar la seguridad de esta tipología de buques, –ahora de nuevo con cita en Torremolinos–, «aún no hemos sido capaces de que ese marco normativo, que a día de hoy proporciona ese marco de Ciudad del Cabo, goce del respaldo suficiente» por parte de los estados «para que su entrada en vigor se haya visto materializada».

«Nos encontramos por tanto con una situación de vacío en la aplicación de internacional de las más básicas y elementales medidas de seguridad para los busques pesqueros de eslora igual o superior a 24 metros que operan en alta mar».

En este punto, el ministro en funciones ha señalado que las consecuencias de la falta de aplicación «de estas condiciones mínimas de seguridad a lo largo de estas cuatro décadas son más que evidentes», ha dicho, añadiendo que «todos los aquí presentes somos perfectamente conocedores del alarmante número de casos de pérdida de vidas del personal de buques pesqueros que se registran cada año».

Al respecto, ha aludido a que los motivos de «esa elevada siniestralidad» vienen marcados, entre otros, por las condiciones peligrosas de trabajo a las que se tiene que enfrentar dicho personal, las cuales «se ven agravadas cuando los buques pesqueros están mal proyectados, construidos y mantenidos; o cuando sus tripulaciones carecen de los elementos básicos en materia de formación».

Asimismo, ha señalado que a ello se une la «situación derivada de la proliferación de la pesca ilegal», cuyas consecuencias, según Ábalos, «se hacen sentir en la conservación de los recursos oceánicos, representando una de las principales amenazas para las poblaciones de peces y los ecosistemas marinos, así como la seguridad alimentaría y la economía de los estados».

ODS

Además, ha incidido en que a escasos meses de una nueva década «el mundo mira nuevamente a un futuro marcado por la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, «a la que el Gobierno se ha sumado con firmeza y convicción».

A juicio del ministro, el sector pesquero debe ser «plenamente consciente» de que su actividad es fundamental tanto para garantizar la alimentación de la población como para la protección del medio marino y sus recursos.

«La transformación de dicho sector hacia una actividad responsable, sostenible y desempeñada por pescadores cualificados, en un entorno seguro y decente contribuirá de manera inequívoca a alcanzar muchos de los ODS», citando, entre otros, el fin de la pobreza, el hambre cero, el trabajo decente, el crecimiento económico o la igualdad de género.

Ábalos, tras destacar la importancia de la pesca en España y la dilatada tradición de una actividad ancestral como la pesquera, ha valorado el compromiso del país por conseguir una actividad «responsable, sostenible y debidamente regulada, junto con el trabajo en común para mejorar la seguridad en el sector», lo «convierte a nuestro país en un referente mundial».

SECRETARIO GENERAL DE LA OMI

Por su parte, el secretario general del de la OMI, Kitack Lim, ha aludido a los 40 millones de pescadores del mundo que forman parte de un sector, que junto con la agricultura, permite contar con alimentos y fuente de ingresos a más de 800 millones de personas.

En este punto, ha señalado que la OMI tiene «un papel destacado» en el sector y ha lamentado que el sector pesquero «no tiene antecedentes de seguridad satisfactorios» debido a diversos factores.

Asimismo, ha recordado que el acuerdo de 1977 en Torremolinos fue el primer instrumento mundial sobre seguridad de los pesqueros. Ha criticado, de igual modo que, a pesar de la mejora la tecnología, «la pérdida de vidas en el sector pesquero sigue siendo alto», lo que ha dicho que es algo «inaceptable».

«Ha llegado el momento de que entre en vigor el acuerdo», ha incidido, al tiempo que ha agregado que hay que «avanzar», valorando que la entrada en vigor del acuerdo de Ciudad del Cabo va a preparar el terreno para que se cumplan varios ODS; llamando, por tanto, a finalizar «esta gesta que comenzó hace más de 40 años».

Por último, el alcalde de Torremolinos, José Ortiz, ha valorado la celebración de esta Conferencia Ministerial y ha incidido en que el municipio es «ejemplo de apertura y convivencia».

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