García-Carrión celebra 25 años con Jaume Serra apostando por sostenibilidad y desestacionalización
Jaume Serra espera cerrar el año 2022 con un crecimiento del 20,5% con respecto al año anterior
Jaume Serra cumple 25 años formando parte del grupo familiar García-Carrión y lo hace llevando a cabo proyectos que apuestan por la sostenibilidad y trabajando para desestacionalizar el consumo de cava.
Así, desde que García-Carrión adquiriera la bodega de Vilanova i La Geltrú (Barcelona) en 1997 para dar inicio a su proyecto de agrupar diferentes Denominaciones de Origen e impulsar una gran cava familiar, la sostenibilidad ha estado presente en todo el proceso de producción, empezando por el respeto al entorno: la masía El Padruell y las 125 ha de viñedos que la rodean guardan bajo su superficie toda la instalación automatizada para hacer eficiente todo el proceso productivo de elaboración, manteniendo intacta la calidad.
Entre sus acciones sostenibles, Jaume Serra –así como los centros de García-Carrión de Huelva, Daimiel, Valdepeñas, Almería, Jumilla, Segorbe, La Rioja y Haza– se encuentra inmersa en un proyecto de autoconsumo junto con Endesa consistente en una instalación fotovoltaica que permitirá, en conjunto, evitar la emisión de cerca de 8.300 toneladas al año de dióxido de carbono.
Además, Jaume Serra ha logrado disminuir la ratio de consumo de energía eléctrica de un 9,1% en la bodega en el último año y ha optimizado el proceso de degüelle del cava, con la instalación de un sistema para poder separar la chapa y hacer una gestión separada de los residuos.
Asimismo, ha estado trabajando en la optimización de sus botellas de cava, reduciendo un 12% su peso hasta los 800 gramos para tener un bajo impacto ecológico. De hecho, con este proyecto ha logrado evitar la emisión anual de 2.000 toneladas de CO2 a la atmósfera desde 2008.
Por otro lado, como compromiso de la compañía con la protección del entorno y para responder a las demandas de los consumidores, la bodega lleva años impulsando la viticultura ecológica como método de producción de algunos de sus productos con etiqueta eco , como sus cavas de uva Macabeo, entre los que destaca el Jaume Serra Cava Brut Orgánico.
«García-Carrión ha creído siempre en los productos de la tierra y trabaja a diario para que su actividad genere un impacto positivo en el entorno. Es por eso por lo que el impulso de la agricultura ecológica es una parte fundamental para la empresa familiar, ya que contribuye a este objetivo de cuidar del medioambiente y, en consecuencia, ha llevado a cabo inversiones para convertir los terrenos y vinos en productos ecológicos certificados», explican.
Todo esto se traduce en una serie de beneficios para el entorno, según explica la compañía, «porque permite eliminar el uso de herbicidas en estos cultivos o recuperar cepas y también contribuye a la sostenibilidad social, dado que contribuye a preservar la vinculación con el territorio y a generar más puestos de trabajo».
OPTIMISMO PARA NAVIDAD Y PARA EL AÑO 2023
En este sentido, Jaume Serra –en la actualidad la única gran cava en manos españolas– se ha mostrado optimista de cara a esta campaña de Navidad y ha afirmado estar «trabajando a diario» y en «estrecha cooperación» con sus clientes para «dar respuesta a sus necesidades y asegurar el mejor escenario».
De hecho, Jaume Serra espera cerrar el año 2022 (incluidas las fiestas de Navidad) con un crecimiento del 20,5% con respecto al año anterior.
Una de las estrategias en las que la bodega catalana lleva años trabajando para diversificar su oferta es la de desligar el consumo de cava exclusivamente en Navidad y ampliarlo a otras épocas del año. En este sentido, cuenta con una línea de productos como el Cava Jaume Serra Ice, pensado para consumir durante los meses de verano, con hielo y en formato cóctel.
JAUME SERRA SIN ALCOHOL
Una de las novedades de este año 2022 es el lanzamiento de Jaume Serra sin alcohol, un espumoso sin similar al cava –tanto en la botella como en el contenido y sabor–. Está pensado tanto para jóvenes como para todos aquellos perfiles que no pueden o quieren beber alcohol, pero «quieren seguir disfrutando del sabor de nuestros vinos y espumosos».
Así, Jaume Serra amplía el abanico de público al que se dirigen ofreciendo alternativas de baja graduación y de productos sin alcohol, adaptados a las necesidades y demandas del consumidor en los próximos años.
