García asegura que las listas de espera son «una de las mayores barreras» para los cribados de cáncer colorrectal
El presidente de la SEPD pide a la ministra una «coordinación nacional» para una implementación eficaz de estos programas
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha asegurado este miércoles que las listas de espera son «una de las mayores barreras» para la implementación de los programas de cribado poblacional de cáncer colorrectal, el tumor maligno más frecuente en España y el segundo en tasa de mortalidad, cuya tasa de incidencia es «superior a la del conjunto mundial».
«Las listas de espera de los procedimientos diagnósticos son una de las mayores barreras para poder llevar a cabo estos planes bien ejecutados», ha expresado García durante el acto de presentación del Libro Blanco sobre el Cribado Poblacional de Cáncer Colorrectal en España , en la sede de la Organización Médica Colegial (OMC).
En ese sentido, ha asegurado que será «muy difícil» absorber la demanda de los pacientes si no se aumentan los recursos. «Esto necesita recursos y esto necesita que sigamos poniendo el foco en la prevención. Yo siempre digo que la prevención y la política no acaban de encajar bien, porque la prevención es invisible y la política busca titulares», ha añadido.
García ha destacado que, desde su llegada al puesto, el Ministerio tiene una «vocación de cambiar esa singularidad que tiene la política de mirar a corto plazo y empezar a mirar a largo plazo», tras lo que ha mostrado su compromiso con «materializar» los programas presentados en el libro, que ha calificado de «joya».
DISPARIDAD DE LAS COMUNIDADES EN LA APLICACIÓN DE LOS PLANES
La ministra también ha recalcado que la prevención permitirá «ahorrar» tanto un gran número de vidas como presupuesto al sistema sanitario, razón por la que ha criticado las disparidades que existen en las Comunidades Autónomas a la hora de aplicar estos programas de cribado, pues considera que hay ciudadanos a los que se les está «privando del derecho de proteger su salud».
Por su parte, el presidente de la Sociedad Española de Patología Digestiva (SEPD) y coautor del libro, Agustín Albillos, ha presentado una serie de datos que muestran estas diferencias, y es que mientras que comunidades como la Comunidad Foral de Navarra han cumplido un 75 por ciento del programa, otras como Baleares apenas llegan al 35 por ciento, mientras que la participación media es de un 42 por ciento.
«Para que un programa funcione la gente tiene que participar. La eficiencia requiere la participación de la ciudadanía. Al menos se necesita que para que un programa sea eficaz haya una participación (…) que supere el 60-65 por ciento», ha añadido.
En relación a ello, Albillos ha explicado que, a pesar de que existe una brecha «importante» en la incidencia y mortalidad de cáncer de colon en hombres y mujeres, la participación es «especialmente baja» en los varones situados entre los 50 y los 60 años, un grupo ya de por sí vulnerable y considerado como población de riesgo medio.
El presidente de la SEPD también ha recordado que la población diana de los cribados es aquella situada entre los 50 y los 70 años, un riesgo que aumenta con la edad, razón por la que pretenden extender a nivel nacional la edad de los cribados hasta los 74 años, tal y como ya han hecho otras comunidades.
Albillos ha justificado esta decisión debido a que se obtendrá tanto un «beneficio» en términos de incidencia y de mortalidad como a nivel de costes, pues «el coste del cribado se ve ampliamente superado por los costes que precisa el tratamiento de aquellos tumores que son de mayor tamaño».
UNA MAYOR COORDINACIÓN ENTRE LAS COMUNIDADES
«¿Qué le pediría a la ministra? Un esfuerzo de coordinación nacional con un objetivo que sería la cobertura del 100 por ciento. Siempre hay que ir a máximos de toda la población entre 50 y 74 años. Si para 2030 se puede lograr esto, habrá una disminución neta en la incidencia y mortalidad por cáncer», ha expresado Albillo.
Además, ha aseverado que esta coordinación puede garantizar la eficacia de los planes, reducir la variabilidad en su implementación y asentar los «pilares» de una equidad territorial que proporcionaría «un estándar de calidad continua y en tiempo real de la asistencia».
De igual forma ha instado a Sanidad a realizar «un esfuerzo» para concienciar sobre el «problema de primera magnitud de salud pública» que supone este tipo de cáncer, y ha puesto como ejemplo las campañas de sensibilización sobre el cáncer de mama.
«El cáncer de colon representa un problema de primera magnitud de salud pública en España. Tenemos un sistema sanitario que ha permitido que estos sistemas, estos programas de cribado de poblaciones, estén en todas las comunidades autónomas, pero tenemos que ser capaces de optimizarlos, disminuyendo esa variabilidad en la participación y en la organización de los mismos», ha agregado.
Albillo también ha recordado que las estimaciones prevén que se continúen diagnosticando «un gran número de casos» por cáncer colorrectal durante los próximos años, por lo que su incidencia y mortalidad seguirán aumentando.