Gamarra critica la falta de «autonomía» de Batet ante la operación de Sánchez «contra la separación de poderes»

Ensalza la «labor intachable» de Felipe VI y asegura que le parecerá «perfecto» lo que haga Juan Carlos I

La portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cuca Gamarra, hace un balance crítico del papel que está ejerciendo la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, en esta legislatura ya que, a su juicio, no está actuando con la «autonomía» que debería ante la «gran operación contra la separación de poderes» que, en su opinión, ha puesto en marcha el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

«Se está debilitando muchísimo la separación de poderes, el principal protagonista de este debilitamiento es el propio presidente del Gobierno y ahí se está echando en falta a una presidenta del Congreso que estuviera defendiendo el poder legislativo desde la autonomía que este poder tiene que tener», argumenta la dirigente popular .

Gamarra recuerda, en una entrevista con Europa Press, «la cantidad de veces» que su grupo, pero también otros, han pedido amparo a Batet ante la negativa del Gobierno a enviar a la Cámara la información que se le requiere, a responder adecuadamente a las preguntas o a dar cumplimiento a las proposiciones no de ley que aprueba el Congreso.

ES PRESIDENTA, NO MILITANTE DEL PSOE

«No se ha contado con el amparo que una presidenta debiera de haber dado a las fuerzas políticas. Es la presidenta de uno de los tres poderes del Estado, no es una militante del PSOE, aunque lo sea», denuncia la portavoz del primer partido de la oposición.

Pese a todo, la exime de responsabilidad en el grado de crispación actual que frecuentemente se refleja en el hemiciclo. «Seguro que hay momentos en los que podría estar reconviniendo y defendiendo a las instituciones del Estado cuando son atacadas desde la propia tribuna con un objetivo de desestabilizar nuestro marco constitucional, pero yo en ese sentido creo que los máximos responsables son los que usan la tribuna para desestabilizar el marco constitucional».

Según Gamarra, «hay un gran intento para transformar la democracia liberal en una democracia iliberal y eso se consigue desde el propio sistema, desde dentro». No obstante, en su opinión, los «máximos responsables de esa operación no es quien tiene la facultad de ordenar el debate, sino aquel que desde la tribuna promueve este tipo de actitudes».

Una de las instituciones a las que se critica desde la tribuna del Congreso es la Monarquía, en los últimos tiempos, sobre todo con referencia a las supuestas irregularidades que se atribuyen al Rey Juan Carlos quien, según el propio presidente del Gobierno, debería dar explicaciones públicas al respecto.

BUSCAN DEBILITAR LA MONARQUÍA

Preguntada si el PP también considera necesario que el rey emérito se explique ante la ciudadanía, Gamarra incide en que «detrás de todas las declaraciones de muchos representantes políticos» sobre el comportamiento del anterior jefe del Estado están «la búsqueda del debilitamiento de la monarquía parlamentaria y el marco constitucional».

«Y el PP no va a participar en esa estrategia. Defendemos la monarquía parlamentaria, tenemos un fantástico Rey y hay que reconocer la fantástica labor que está desarrollando desde su proclamación. Ahí debemos centrarnos», enfatiza la portavoz, desde el convencimiento de que «a cada uno hay que valorarlo por la labor que está desarrollando» y de que Felipe VI reina «de manera intachable» e «impecable».

Respecto a la hipotética vuelta de Juan Carlos I a España desde su exilio en Arabia Saudi, se limita a señalar que es «un ciudadano español que puede decidir en el momento que quiera regresar a su país». «Lo que él haga me parecerá perfecto», remacha.

Por último, preguntada sobre la pendiente renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Gamarra insiste en que «si el PSOE quiere es fácil y factible» llegar a un acuerdo, siempre y cuando los socialistas «asuman la necesidad» de cambiar el sistema de elección de los vocales de manera que «los jueces elijan a los jueces» como, subraya, demandan no sólo instituciones europeas, sino también nacionales.