Francisco López Serrano mezcla crónica y ficción en su novela sobre el inicio de la guerra civil en Santander
El escritor Francisco López Serrano protagoniza hoy una nueva sesión de los Martes Literarios de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) con su novela Las vísperas muertas , en la que combina hechos históricos y ficción policiaca para relatar los acontecimientos que tuvieron lugar en el año 1936 en la antigua Universidad Internacional de Verano de Santander, con el inicio de la guerra civil.
Durante la rueda de prensa que ha ofrecido de manera previa al encuentro que tendrá lugar a las 19.00 horas, el autor zaragozano ha explicado que el libro, que ganó el Premio Provincia de Guadalajara de Narrativa Camilo José Cela 2022, parte de la investigación sobre el asesinato de un estudiante de filiación izquierdista en el marco de la Universidad Internacional de Verano de Santander en 1936, unos hechos ocurridos hoy hace 87 años.
El escritor ha contado cómo la lectura de un artículo de un amigo suyo sobre la depuración de profesores republicanos fue el germen de una novela que ha tenido una ardua labor de documentación.
Así, López Serrano ha afirmado que «la labor de documentación fue exhaustiva, viajé mucho a Santander, visité hemerotecas, periódicos, fondos históricos y el Palacio de la Magdalena», algo que «fue un placer».
Toda esa documentación le llevó a tener un material que no está incluido en la novela en su totalidad por su amplitud, y aunque sabe que el lector no lo notará, para él es como «a quien le amputan un brazo y lo siente todavía», porque percibe perfectamente esa parte que no pudo estar en el libro.
«He sacrificado mucho material porque había mucha información y me ocurre que cuando quito a una novela partes es como si me arrancaran algo, cuando la releo veo esas partes suprimidas y tiendo a pensar que el lector va a apreciar esa sutura, pero es una mera superstición mía», ha explicado.
Las vísperas muertas sigue la línea de otras de las novelas del autor, que sin considerarse un escritor del género policiaco, utiliza este estilo para «contar mucho más». «El tema policíaco es una excusa porque en mis novelas siempre narro muchas más cosas, además de tener mucha crónica», ha detallado.