Finalizan tras 22 horas las labores de extinción del incendio de la nave ganadera de Cabezón
Esta noche han finalizado, tras 22 horas de trabajo, las labores de extinción del incendio declarado la madrugada del jueves en una nave ganadera de Mies de Sajón (Cabezón de la Sal) y que ha afectado a una cantidad equivalente a 15 trailers de alfalfa, avena y paja, maquinaria agrícola y a la cubierta de la edificación.
En los trabajos para sofocar el fuego han trabajado los bomberos de los parques 2 y 6 del Servicio de Emergencias 112 de Cantabria, y los del Ayuntamiento de Santander, voluntarios de Protección Civil de Suances y Cabezón de la Sal, Guardia Civil y Policía Local, según informan los servicios de emergencias.
La nave afectada cuenta con una extensión aproximada de 550 metros cuadrados y unos siete metros de altura y está construida con bloques de hormigón. No albergaba ganado, ya que se utilizaba como almacén, por lo que no se ha producido la pérdida de animales.
El Centro de Atención a Emergencias recibió una llamada alertando del fuego pasadas las 1.40 horas del jueves y movilizó a los parques de bomberos del 112 con sede en Valdáliga y Los Corrales de Buelna, a agentes de la Guardia Civil y la Policía Local, y a la Agrupación de Voluntarios de la localidad.
Con los trabajos avanzados, sobre las 4.00 horas, los efectivos solicitaron al 112 el apoyo de los bomberos de Santander para la dotación de agua.
En un principio los bomberos del 112 atacaron el incendio desde tierra y en altura, con la ayuda de una autoescala. Una vez bajada la carga de fuego, con el apoyo de maquinaria pesada manejada por un voluntario de la Agrupación de Protección Civil, se comenzaron las labores de extracción de las toneladas de hierba y cereal contenidas en la nave para poder proceder a su extinción.
Los trabajos realizados durante la pasada noche han sido complejos, en un principio, por la importante carga de fuego y, posteriormente, por la gran cantidad de humo generado, que dificultaba la visión.
La intervención se ha extendido hasta esta madrugada puesto que este tipo de materiales en grandes cantidades mantiene el fuego bajo las capas superficiales enfriadas, por lo que hay que extraerlo, removerlo y refrigerarlo en su totalidad para conseguir apagar las llamas.