Finalizan los trabajos de restauración del monumento a Agusto González Linares
El Ayuntamiento de Santander ha finalizado los trabajos de restauración que se han venido realizando en las últimas semanas para recuperar el monumento erigido en homenaje al naturalista cántabro Augusto González Linares.
El grupo escultórico se trasladó hace aproximadamente un mes a la plaza de Italia, donde se han realizado las labores para la restitución del brazo de la figura femenina del monumento que resultó dañado este verano.
Estas tareas se completarán ahora con trabajos de jardinería en el lugar donde se levanta el monumento, para contribuir así a realzar el conjunto escultórico.
La concejala de Cultura, Miriam Díaz, ha recordado que el grupo escultórico dedicado a Augusto González Linares ha sido objeto de diversos trabajos de restauración en los últimos años.
Así, en 2010 se incluyó dentro de las actuaciones del proyecto de rehabilitación y conservación de monumentos urbanos puesto en marcha por el Ayuntamiento de Santander.
Y en 2016 se sometió de nuevo a labores de conservación y restauración, con la limpieza general, el tratamiento de las piezas de bronce, el sellado de fisuras y la reconstrucción de algunos dedos dañados en la figura femenina.
En esta ocasión, los trabajos se han centrado en la restitución del brazo de esta misma figura, que había vuelto a sufrir daños.
Además, desde ahora el monumento se ubica de nuevo en la plaza de Italia, el lugar donde se levantó hace ya más de un siglo, en un espacio preferente.
Se trata también de un emplazamiento más visible y seguro en el que, según ha precisado la edil, se pretende evitar que el grupo escultórico sufra en el futuro daños como los registrados en su anterior ubicación, en los jardines situados entre las playas de La Concha y el Sardinero.
UNO DE LOS MONUMENTOS MÁS ANTIGUOS DE LA CIUDAD
El grupo escultórico de Augusto González Linares, inaugurado el 14 de agosto de 1908, es uno de los monumentos más antiguos de la ciudad, en concreto, el segundo de mayor antigüedad tras la estatua de Velarde.
La obra, de 2,5 metros de altura y que combina piedra caliza, mármol y bronce, se levantó originalmente en la plaza dedicada a González Linares, Hijo Ilustre de Santander, en lo que hoy es la plaza de Italia.
El monumento consta de un pedestal artístico con una figura femenina labrada en piedra que representa a la Fama ofreciendo una rama de laurel al naturalista cántabro, representado por un busto de bronce situado sobre el pedestal.
Detrás de la figura aparece el escudo de la ciudad, aunque sólo se perciben las cabezas de los patronos, San Emeterio y San Celedonio, y sobre la base de piedra se lee el nombre de Augusto González Linares.
A lo largo de sus más de cien años de historia el monumento ha recorrido distintos emplazamientos en la ciudad y ahora ha regresado a su ubicación inicial.