Feijóo ya está en la sede para seguir el recuento electoral con su equipo, que exhibe un «optimismo razonable»
El líder del PP se ha volcado en la campaña electoral, recorriendo más de 15.000 kilómetros y visitando todas las autonomías
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha llegado alrededor de las 20.00 horas a la sede nacional del PP, en la madrileña calle Génova, para seguir el recuento electoral de las elecciones autonómicas y municipales junto a su equipo, que tiene «sensaciones buenísimas» y exhibe públicamente un «optimismo razonable», según fuentes de la cúpula del partido.
Junto a Feijóo, estén en la sede del PP, la secretaria general del PP y portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Cuca Gamarra; el coordinador general del partido y director de campaña, Elías Bendodo; el vicesecretario de Política Territorial, Pedro Rollán; y el portavoz de campaña y vicesecretario de Cultura y Sociedad Abierta, Borja Sémper, entre otros.
Los populares admiten, justo poco antes del cierre de los colegios electorales, que tienen «sensaciones buenísimas» y que les llegan datos optimistas de los distintos territorios. «Optimismo razonable» y «optimismo moderado» son algunas de las expresiones que utilizan en el equipo de Feijóo, a la espera de tener los datos del escrutinio, según fuentes del partido.
Feijóo, que afronta este domingo sus primeras elecciones de ámbito nacional como líder de su partido, ha llamado esta mañana a votar de forma «masiva» con un voto «claro y contundente», ya que, según ha dicho, estas elecciones «mandan un mensaje de lo que la gente quiere para el futuro».
«Cuanto más claro sea el voto, cuanto más contundente sea el voto, cuanto más determinante sea el voto, las urnas se impondrán a cualquier tipo de consideración posterior», ha manifestado votar por primera vez en Madrid, en el colegio Ramiro de Maetzu.
FEIJÓO HA RECORRIDO MÁS DE 15.00 KILÓMETROS
Feijóo, que ha recorrido más de 15.000 kilómetros en estos 15 días y visitado todas las Comunidades Autónomas, ha centrado su campaña en apelar al voto útil al PP para «empezar a derogar el sanchismo» y «pasar página» de cinco años de «división», «desmanes» y «desgobierno». En sus últimos mitines, ha reclamado abiertamente apoyo a los electores de Ciudadanos, Vox y socialistas «avergonzados» con los pasos de Pedro Sánchez.
Los populares hacen un balance positivo de su campaña porque creen que les ha ayudado a captar indecisos, algo que, según fuentes de la formación, no ha conseguido los socialistas tras los «escándalos» de los últimos días como la presunta compra de votos en Melilla, Mójacar (Almería) o Albuduete (Murcia) y la polémica en torno a las listas de Bildu con «asesinos».
A la espera de conocer los resultados tas el escrutinio, el PP se muestra optimistas y ve opciones de arrebatar el Gobierno autonómico al socialista Ximo Puig, que está instalado en el Palau de la Generalitat desde el año 2015, si bien todas las encuestas coinciden en que el presidente del PPCV, Carlos Mazón, necesitará los votos de Vox. De la misma manera, el PP cree que su candidata, María José Catala, puede hacerse con el bastón de mando municipal y desbancar del poder a Joan Ribó (Compromis), según sus datos internos.
Aparte de la Comunidad Valenciana, los populares aspiran a lograr también los gobiernos autonómicos de La Rioja, Aragón o Baleares, así como mantener los gobiernos de Madrid y Murcia.
Además confían en incrementar sus capitales de provincia, pasando de las 11 actuales a una treintena. En 2019, el PP logró 22,62% de los votos frente al 29,3 del PSOE, con una diferencia de más de un millón y medio de votos. Los populares esperan ahora ser la fuerza más votada y superar a los socialistas.